Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

José Sierra

La guerra de las banderas

Existe el mito, una leyenda urbana como se diría ahora, de que en verano no hay noticias y que por eso los medios de comunicación «se inventan» por menos de nada una «guerra» con lo que sea, aunque el agua es casi siempre el motivo favorito. Claro que la leyenda es inexacta, como casi todas, y no son los periódicos los que generalmente abren estas «guerras» del agua, sino algún político interesado, con algo que ganar y nada que perder. Hace unos días, Ecologistas en Acción identificaba los puntos críticos del litoral valenciano con sus «banderas negras» con las que «contrarrestar la desinformación que significa la concesión de banderas azules a diferentes playas valencianas». Ya tenemos otra guerra abierta, pero observen que no son periodistas quienes la lanzan.

Las «banderas azules» llevan ya muchos años entre nosotros como para cuestionar ahora su coherencia y capacidad para motivar a los ciudadanos. De no ser así no habrían llegado a donde están ahora en reconocimiento popular. Lo que ocurre es que se apoyan en unos parámetros destinados a acreditar la calidad del baño veraniego desde un concepto cada vez más amplio. Y nada más. Ni menos. Una playa puede haber sufrido un episodio de contaminación fecal a lo largo del año y tener una merecida «bandera azul» cuando llega el verano. Desde luego que algo no funciona del todo bien en esa parte del litoral y habrá que corregirlo. Es probable que la depuradora no trabaje correctamente, que tenga un baipás para tirar las aguas sucias directamente al mar cuando llueve, o que lo haga a través de un emisario defectuoso, o quizás que haya acequias vertiendo al mar... ¡Vete tú a saber!, o pregunta a los ecologistas, que te lo dirán. Pero una bandera no «contrarresta» necesariamente a la otra, ni al revés. O sea, ¿que no hay guerra?, dirán, pues no, no hay guerra. Nos bañaremos preferentemente donde ondee una bandera azul y nos alinearemos con aquellos que aspiran a lograr un litoral cada vez más vivo y exento de cualquier tipo de contaminación. Sin guerras.

Compartir el artículo

stats