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No sin mis asesores

Que no salga de mi asombro no es tanto a causa de mi ignorancia, siempre más grande mientras el universo se expande. O porque me acuerdo de Juan Gil Albert y hago bien en esto. Pero supe por un amigo que sigue de cerca las cosas de este ayuntamiento de las maravillas (sin Alicia pero looking-glass) que tras la convocatoria, no sé si necesaria o legal „no soy como mi primo el ex asesor jurídico de toda una vida en la casa del Comú„ que fueron elegidos los que ya lo eran en el anterior mandato, el de Rita, Rita, Rita. Los de ella la han llevado al Senado, buen retiro. Pero me refiero aquí a los de la izquierda. ¡Ay!, he dejado pasar casi dos meses y nadie ha dicho esta boca es mía, ni siquiera los 60 que enviaron su currículos y que no fueron elegidos para tan codiciado puesto, bien pagado y con horario elástico. Es lógico que les premien y consigan su silencio, porque gracias a ellos están donde están, que linda con ninguna parte y porque vamos hacia otras elecciones esenciales. Y luego pueden despeñarse unos u otros y como si tal€ Todo pende de un hilo pero el guionista no es el de Hitchcock ni el genio la dirige. Ignoro si tienen dirección.

¿Ha sido ocultado? ¿Fue hecho adrede? ¿No tenían otro modo que hacernos creer en un concurso de méritos sin jurado ni bases ni modelo? Es a dedo pero la fachada sirve para parecer trasparente. Me encanta el trampatrojo. Conste que yo ni quiero ese cargo, ni me lo ganaría. A mi me ofrecieron otros mejor pagados en su momento, a derecha e izquierda y dije no y no. Eso sí, asesoré gratis y ganaron las elecciones y no las han vuelto a ganar todavía. «I´m sorry». Es culpa de los asesores.

Linda con la caricatura como tantas cosas que han ido diciendo o haciendo en la casa madre, con fachada de Mora, y con un balcón añadido en los setenta para salir Franco a saludar el día que en el Lys se estrenaba «Los desafíos» de Erice y otros dos, y no había doscientas personas aplaudiendo, pero es un añadido que desfigura la fachada de Mora, insisto porque a los agrónomos les cuesta entender de arquitectura o arte. La buena gente se ha ido a fotografiar y en su santa ignorancia todo se puede perdonar. Es como fotografiarse en el Valle de los Caídos y decir que te gusta. Hay gustos€

Pero en los recovecos de esta casa laberíntica y sin fauno, pasan cosas que hacen reflexionar a un tonto como yo, que se atreve a pedir un ejemplar de un libro publicado por este ayuntamiento (¿de todos?) del que soy autor con Monjalés: el catálogo de la muestra del escultor Montesa. Y ni me lo dieron en la inauguración ni me lo han dado ahora. Y lo han publicado sin contrato y eso en España es a todas luces ilegal€ ¡Ay! es que tienen asesores para todo y lo hacen bien, ya ven. Ya publicaron a Kavafis sin tener los derechos, en los 80. Y hace poco a mí. Diez meses después me dicen que Cultura no me puede dar un ejemplar hasta que decida un asesor de turno de una tal Tello (que ya estaba antes eh, el asesor, no ella, que es nueva y ja vorem). Por lo que espero la llamada desde Suecia y no de los que se hacen los suecos. Me haría más gracia, aunque no me merezco ninguna de las dos. Son políticas. Y ya a mi edad, miren, voy con cautela, quiero comer sano y no sapos. Yo, claro, no necesito asesores.

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