La noche del pasado viernes se celebró en Tavernes de la Valldigna la tradicional cena de encuentro de aficionados a la meteorología de principios de otoño, la cual todos conocemos como «Llamada a la gota fría». El encuentro reunió a más de 50 aficionados a la meteorología, la mayor parte de ellos miembros de la Asociación Valenciana a la Meteorología (AVAMET). Se puede decir, sin temor al equívoco, que esta cena ha supuesto el encuentro no divulgativo más numeroso de todos aquellos organizados por AVAMET.
El éxito de esta tradicional quedada viene de muy lejos, de hecho se puede decir que este tipo de encuentros fue el precursor de lo que ahora es AVAMET, ya que permitió compartir personalmente nuestra afición, dando el salto desde los foros de internet a la comunicación en persona entre los diferentes aficionados, que normalmente teníamos complicado coincidir en vivo puesto que cada uno solemos residir en una población distinta. En estos encuentros compartimos experiencias meteorológicas y también proyectos e ilusiones, una de ellas, ya hace más de 7 años, fue la de nuestro difunto amigo Josep Peinado y fue AVAMET. Él fue quien redactó un esbozo de los estatutos para una futura asociación, que aglutinara los intereses de los aficionados a la meteorología, les diera fuerza para desarrollar proyectos comunes y los representara frente a entidades. El pasado 23 de septiembre hubiera cumplido 44 años y estamos seguros que allá donde esté se sentiría orgulloso de los progresos de la asociación.
Con cada nuevo socio que llega a AVAMET y aporta su granito de arena en la medida de sus posibilidades, está contribuyendo a hacer más grande este proyecto que busca aportar al mundillo de la meteorología aquello que estima necesario.
