Pocos programas me entretienen tanto como una noche electoral en la que seguir resultados y reacciones en directo y así me preparé la noche del 27S refresco y aperitivo en mano para disfrutar de unas elecciones emocionantes. La oferta televisiva fue variada y mi pulgar lo sufrió porque no daba a basto entre el Twitter, mando a distancia y el dualshcok que es el mando de la PS4. No penséis que me dediqué a matar zombies mientras avanzaba el escrutinio, resulta que con la videoconsola también puedo ver en directo la emisión pública catalana. Hace ya demasiado tiempo que la señal con la que crecí, TV3, se marchó de nuestro territorio con maniobras e intenciones políticas de por medio para evitar paradójicamente en un mundo globalizado, que no podamos ver aquello que cuentan nuestros vecinos con los que por si todavía no lo sabéis, tenemos mucho más en común que con otras regiones del país y no hablo sólo del idioma.
A día de hoy y cien días después de la llegada del nuevo gobierno valenciano, seguimos sin noticias del retorno de TV3 y sospecho que va para largo visto el incierto y desolador panorama audiovisual que tenemos en casa. Poco APM y Polònia pero mucha teletienda y tarotista, cosas de la TDT?
TV3 despertó mi admiración ante tal despliegue informativo, acompañado de una puesta en escena hecha con mucho gusto y un grafismo espectacular en un Parlament hecho plató donde la realidad y lo virtual se daban la mano para ver los nuevos colores y caras de los miembros electos del hemiciclo. No pude evitar sentir cierta envidia profesional de aquello que pudo ser, no fue y veremos si será en nuestra comunidad, donde el culebrón RTVV parece no tener final.
Y mientras disfrutaba del buen hacer colindante, zapeaba a la Sexta que ya se ha ganado por derecho aquello de servicio público en un canal privado porque la 1, bajo mínimos de audiencia, la vi de pasada. Dice el presidente de RTVE que la noche electoral la ganó GH y yo digo que venció la credibilidad, porque no es lo mismo salir del paso que hacer las cosas con ganas.
