Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Esplendoroso amado

No es fácil mantener la tensión creativa a lo largo de una extensa trayectoria fecunda, y menos todavía renovarla con idéntico espíritu al del joven que se enfrenta a un reto importante. Pero Amado ha apostado invariablemente por lo más difícil. Y ha ganado siempre.

Así ha sido esta vez. Comenzó por convertir su tienda en un amplísimo salón y ofrecer -como los grandes modistos de la era dorada- un desfile (dos, en días consecutivos) en su propia casa. Buena situación de las espectadoras, iluminación perfecta y música de siempre en versiones actualizadas, generaron el ambiente más propicio. Siete maniquíes de primera fila y dos presentadoras con encanto, Ángela Pla y Laura Grande, fueron eficaces comunicadoras.

Como prólogo, toda una declaración de intenciones: mares de ondas gris y blanco decorando un maxiabrigo imperial ornado de chinchilla, sobre largo vestido coordinado; expresivo aviso de lo que venía después. Para empezar, arrollador sportwear: cortas chaquetillas de napa negra pespunteadas o troqueladas, con las anchas cremalleras de remate dorado lanzadas por Tom Ford, porque Amado está al día en todos los detalles. Siguió una larga serie de chaquetas y chaquetones, boleros y cazadoras con el renard como protagonista, minuciosamente fileteado entre finas tiras de raso, con efecto de plumas y en hermosos colores: azul Prusia, naranja, antracita, perla, matizados en espiga o formas lineales.

Y la sorpresa de los reversibles. Cada prenda descubre un interior delicioso: el reverso de la piel que (según novedosa técnica que Amado, siempre en avance, es el primero en adoptar) ha sido previamente teñida y luego estampada, con bellos dibujos. Un proceso complejo, pero de resultado absolutamente magnífico. También sorprenden los nuevos astrakanes especialmente tratados, con irisación de colorido y sedosa textura, que configuran chaquetones con puños y cuello movible de renard o de visión.

El visión, en manos de Amado, se ha vuelto joven, ligero, desprejuiciado. Con exquisitos trabajos, se presenta en leves boleritos o abrigos vaporosos. Y lo más original: embelleciendo conjuntos de pantalón y blusón de seda estampada «Paisley» con elegantes chalecos largos de plena actualidad y suntuosos cuellos de quita y pon. Las cotizadas martas cibelinas aparecen en clave sport, con juego de tiras y bolsillos parche, incluso sobreponiéndose a un tejido sedoso como bodoques o flores en relieve. Y las preciadas, suavísimas chinchillas, ribetean abrigos de encaje o capas de astrakán. Lujo, sí, pero bien equilibrado, regido en todo momento por una armonía marcada por un sello de vanguardia.

Las ovaciones, que Amado tuvo que agradecer con palabras emocionadas, expresaron la entusiasta acogida del público. En él, Mayrén Beneyto con Mercedes Devesa, Victoria Cercós (destacada colaboradora con sus joyas) acompañada por Sela Falcó, la baronesa de Alaquàs Amparo Corell con sus sobrinas Beatriz y Belén, las Dras. Consuelo Chofré y Ana Vilar, Menchu Trénor, Marisa Marín, Ino Justicia, Elvira Ferrer, Laura Cano, Marisa Martínez, Celia Valencia y la sra. de Genovés. Hubo también presencia masculina: Elia Mª Martínez Suñer acudió con su marido. Y, sin compañía femenina, un hombre de buen gusto: Juan Antonio Murgui.

Compartir el artículo

stats