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Abogada especial contra tronadas

La talla de la Virgen es románica en origen, lo cual denota por sí misma su antigüedad, y fue transformada en gótica y barroca con el paso del tiempo y las modas. Desde hace 110 años es patrona principal de Foios con el dulce título del Patrocinio, donde es venerada con gran fervor en sus dos fiestas, la de verano el 17 de agosto y la de invierno el 8 de noviembre. En esta última destaca, junto con los actos religiosos, misa y procesión, la Diana, a las seis de la mañana, en que se canta una especie de polca por todo el pueblo, y «les calderes».

Su trance más difícil de la que se salvó fue en la pasada guerra, gracias al heroísmo del párroco Antonio Sorlí Balbastre, quien sufrió cruel martirio el 8 de noviembre de 1936, a pesar de lo cual no confesó a sus torturadores hasta la muerte donde escondió la venerada talla, salvándola de la hoguera iconoclasta.

Mientras que en Roma está ya el proceso de su beatificación a punto de concluir y su ceremonia de realizar, los de la «new age» local, supuestos defensores de la Memoria Histórica, acaban de intentar de nuevo borrar su nombre del callejero local, borrar de un plumazo de la historia este hecho objetivo y real, verídico, como si el acontecimiento, al menos en lo que tiene de valor histórico-artístico-patrimonial, no hubiera ocurrido o no mereciera la pena recordarlo. De hecho, cuando en alguna ocasión los de su corriente ha hecho alusión histórica a la Virgen siempre han acallado este triste episodio.

«Cuando en nuestra España entraron/ los moros conquistadores,/ de Foyos los moradores/ vuestra Imagen ocultaron,/ prenda tan angelical/ conservó intacta la tierra/», comienzan narrando los Gozos su historia. Pueblo agrícola total, a ella se aclamaron siempre sus moradores contra las inclemencias del tiempo y las riadas del descontrolado barranco de Carraixet, especialmente en los temporales de 1830, 1868 y 1874, cuyas descripciones remiten a que debieron ser dramáticos episodios de gota fría.

En una de ellas, la de 1830 -habrá que revisar la datación que aparece en el programa oficial de la «festa d hivern» de este año- , estuvo tres días de agosto sin parar de llover día y noche, lo que provocó desbordamientos e inundaciones. Desesperados, con la lluvia en marcha, sacaron en procesión la imagen de la Virgen el 17 de agosto y cesó la lluvia. En acción de gracias, hubo grandes rezos y reconocimientos.

Se creó la asociación mariana de su nombre y se acordó celebrarle todos los años solemne fiesta en dicho día -la suya oficial era y sigue siendo cada 8 de noviembre, trasladada popularmente al segundo domingo de dicho mes y conocida por la la «festa d´hivern»- , decisión ésta que la Santa Sede aprobaría oficialmente en 1905, concediendo «benignamente honores y privilegios de eminencia y de liturgia», siéndole «añadida a la lectura sexta del oficio de la Bienaventurada María Virgen del Patrocinio», a petición del pueblo ejercitando la «antigua y pía costumbre de los pueblos y reinos de elegir a uno o más santos como patronos»

A partir de entonces, siguen diciendo los relatores de su historia, la Virgen del Patrocinio protegió siempre los campos y casas de la población, o, al menos, hizo que los daños en él no fueran de la gravedad de los acecidos en otros términos municipales.

Por ello se ha cantado siempre que«"Sois de Foyos el consuelo/ en toda tribulación,/ pues su mayor protección/ en Vos le deparó el Cielo/€ Si la enfermedad aqueja,/ tronada, rayo o centella/ sois Vos la brillante estrella/ que todo peligro aleja,/ por lo que el pueblo leal/ en vuestro culto se esmera/».

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