Este sol de noviembre está siendo un lujo meteorológico. Aunque no el más frío, el penúltimo mes del año suele ser nuboso y con aires de penumbra merced a su característica atmósfera otoñal, pero en los últimos días nos ha brindado una atmósfera diurna radiante. Las temperaturas nocturnas no están siendo especialmente frías, pero en las zonas altas hiela débilmente, lo que se concreta en espectaculares contrastes de temperatura entre la noche y el día. A primera hora de la tarde se están superando los 20 ºC en numerosos lugares, en los que después se producen heladas de madrugada. En zonas de los Pirineos, Castilla y León, Aragón y otros muchos puntos de la España interior se están dando diferencias de más de 25 ºC entre las temperaturas máxima y mínima diarias. Esa diferencia entre la máxima y la mínima es lo que en meteorología y climatología se conoce como amplitud térmica, y en este mes de noviembre las estamos teniendo muy notables. Esta vez, el dominio es del aire cálido, pero en noviembre de 2007 se produjeron extraordinarias amplitudes diarias del orden de los 30 ºC con un acusado dominio del frío. En algunas zonas de Teruel y Guadalajara hubo aquella vez algunos días en los que después de una temperatura máxima de 14 ºC (sobre cero) se alcanzaron mínimas de -17 ºC de madrugada. O sea, 31 ºC de diferencia entre la máxima y la mínima, con heladas de órdago para esta época del año.