Greenpeace hace su balance anual del 2015 y destaca los importantes retrocesos en materia ambiental llevados a cabo por el Gobierno durante esta última legislatura. «El Partido Popular ha perdido la oportunidad de impulsar políticas sociales, ambientales y económicas que favorezcan el empleo verde y de calidad. Ha continuado poniendo trabas a las energías renovables y ha criminalizado la protesta pacífica con la aprobación de la denominada Ley Mordaza», aseguran.

Respecto a los resultados de las intensas negociaciones de la Cumbre del Clima de París, la valoración de Greenpeace es que es un punto de partida para el abandono de los combustibles fósiles pero con compromisos insuficientes para lograrlo. Por ello recuerda que solo será posible alcanzar el objetivo con el abandono total de los combustibles fósiles en 2050.

Como aspectos positivos, la entidad ecologista celebra que este 2015 se ha logrado aumentar el apoyo social para sentar las bases que garanticen la primera área marina protegida del Santuario en el Alto Ártico. Por ello, 2016 será clave para lograr su declaración. Además, más de siete millones de personas han conseguido que las compañías Shell y Statoil abandonaran las prospecciones en la zona y que Obama anunciase que cerraba Alaska a las prospecciones durante dos años. Además, el Tribunal Internacional del Mar declaró ilegal el Asalto al Arctic Sunrise y la detención de los Arctic30 por parte del Gobierno ruso.