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La brecha de Panamá

No cabe mucha sorpresa la desvelarse la documentación de uno de los bufetes más acreditados de Panamá, líder en creación y gestión de sociedades offshore. Para el Gobierno de España, desde 2012 no es un paraíso fiscal: no es miopía, sino intereses creados. Por el medio va el contrato del canal sobre cuyo sobrecoste se discute mientras se prepara la inauguración.

El canal que ha quedado al descubierto es el de miles de personas y empresas que surcan con sus inversiones y movimientos haciendo gala de globalización del capital. En buena parte, la razón fundamental es reducir los impuestos o ocultar ganancias y provengan de donde provengan, ganadas o no en buena lid. Pueden ser beneficios o procedentes de tráfico, en algún caos o de sobornos.

De Pilar de Borbón se supo no hace mucho que heredó de su padre y mantuvo una cuenta en Suiza que luego movió a EE UU. Así que la sociedad de Panamá, abierta muy pronto, y adquirida a navieros griegos, si sorprende es por los años en que ha durado llevada por su marido o su hijo. Sobre su cuantía y movimientos no sabemos nada, como ignoramos, de momento, si había declarado a hacienda su existencia o si aprovechó la amnistía fiscal de Montoro para repatriar todo o parte. Esta campechana señora puede haber servido de intermediaria para negocios o para donaciones? Cuando la abrió, el Fisco español era muy blando y ha tenido muchas décadas para pensárselo. Como la cerró hace poco puede tener consecuencias fiscales.

Esta es una guinda más en un fichero de lujo en el que lucen especialmente Messi y otros jugadores de fútbol, un grupo de amigos de Vladimir Putin, un exministro francés, o la esposa de Arias Cañete, una Domecq. Va a tener más repercusiones lo de la familia Macri, aunque no sabemos si para un alcalde de Buenos Aires era obligatorio declarar sus cuentas y sociedades en el extranjero en 2009 (en España no lo ha sido hasta hace poco y no todos en las Cortes han dado información pormenorizada).

Nuestros enlaces con los paraísos fiscales son varios. Zaplana usó de ellos para pagar a Julio Iglesias, como rastreó Francesc Arabí en este periódico. Y la Bienal de Valencia se pagó a través de las islas británicas del Canal de la Mancha en tres ocasiones. La última, sin celebrarse la edición como compensación a Setembrini. Pero también Bankia usó esta vía para la compra del hotel en el Caribe (en la Riviera Maya) con ganancias de amigos e intermediarios. Barbados o las Islas Vírgenes son el refugio de operaciones bajo sospecha, algunas investigadas y no cerradas, otras no.

Lo que ahora la Fiscalía investigue sobre este aporte de documentación (de un solo despacho, hay muchos) y de los datos que Hacienda acabe consiguiendo o recabando si tiene voluntad de cortar con esta vía de agua (de fraude más bien) va para largo, por lo que conocemos de las peticiones de datos en otros casos en marcha (como el de Ignacio González y su dúplex). Mientras el pool internacional de periodistas estudia y analiza los datos, los nombres, la cuantía y las operaciones „verdaderas maniobras en la oscuridad„ son más difíciles de trazar así como el origen de la pasta. La habrá legítima y habrá muchas que ya han prescrito, como suele suceder, porque se descubre tarde y mal y es muy costoso (en equipo y operaciones) averiguarlo. Va para largo sellar la vía de Panamá.

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