Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Los años veinte más amables

En la aplaudida novela Tú no eres como las otras madres, de Angelika Schrobsdorff, se lee: «Imagino los años 20 como un cometa que, en una noche breve y sin estrellas, deja un rastro ancho y luminoso entre dos guerras mundiales».

Ese rastro funciona todavía y sigue ejerciendo su poderosa atracción. Su encantamiento brota aquí y allá, en manifestaciones diversas. Como es el caso de Esther D. Braun, una mujer de curiosa trayectoria que la llevó, de su Santander natal, a Madrid; de los estudios comerciales, a la fisioterapia, para convertirse después en profesora de yoga tras un sólido aprendizaje en Suiza, revalidado por una larga estancia en la India, donde recibió de manos de Indira Gandhi su diploma oficial. En 1970 creó en España la Asociación filial de la Intenational Friends of India, orientada a los temas culturales: filosofía, artes, religiones, medicina, además del yoga, cuya enseñanza ha ejercido más de veinte años. Pero no desantendía su irrefrenable afición a la pintura, que cultivó con clases particulares y, sobre todo, con la práctica incansable de quien se siente movido por un hondo impulso.

Así, en 1984 fundó con otras pintoras madrileñas el grupo Carros de fuego, con el que expuso en distintas salas de la capital. Políglota y viajera, ha celebrado numerosas exposiciones individuales en Miami, hasta fijar por fin su residencia actual en Gandia, donde sus obras se han presentado en 2013 en la Sala Alas Coll y el Palau Ducal, así como en el Ayuntamiento de Benirredrá y el Centro Cívico de Xeraco.

No conozco personalmente a Esther, pero he podido captar su fervoroso entusiasmo, que en gran medida ha centrado en una visión directa y colorista de los Años Veinte reflejados en la moda. Inspirándose en los grandes ilustradores y artistas de la época, Esther Braun perfiila, con la fresca intuición de los que se forjan a sí mismos, un panorama que juega con dulces estampas evocadoras enfrentadas a las líneas más características del Art-Déco. Es una ventana amable, abierta a un tiempo pasado, que bien puede servirnos de antídoto a las continuas tribulaciones del presente.

Compartir el artículo

stats