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La Virgen de Ribó

He visto el controvertido video «L´orgull de ser valencians», y aunque tiene cierto exceso de Albufera y raíces profundas, no vi nada vergonzoso en él y el profesor y ensayista Gustau Muñoz sostiene que es bueno arrebatarle a la derecha el imaginario que manipula con la intención de atizarle al adversario por supuesta falta de amor a las esencias. Como hace la competencia en su titular: «Ribó no aparece en ningún acto de su primera fiesta de la Virgen como alcalde». Aparte la desastrosa sintaxis que no sé si insinúa que el alcalde debe aparecerse como los seres celestiales o es que hay que ponerle a la Virgen la banda y el fajín de alcalde (ya les gustaría), la Virgen es una cosa muy íntima y no sé si es su Vigen, la de Ribó, la mía es la de Sales que tiene una melena más larga y lujosa que la Cheperudeta.

Joan Ribó, el alcalde, aparecer, se apareció poco, incluso en la Fira del Llibre, que es fiesta rigurosamente laica. El problema se llama lumbago y dejó doblado al alcalde ciclista que se había revelado como un maestro en la fabricación de gestos inteligentes. También capté ciertas señales de estrés en Mónica Oltra la última vez que la vi, comprensible teniendo en cuenta el estado (comatoso) de las cuentas, la necesidad de multiplicarse para apuntalar un acuerdo nacional de izquierdas y trabajar contra corriente. Si defiendes el recorte de pensiones, de derechos y de impuestos, te aclaman los poderes terrenales, ante el silencio persistente de los celestiales.

La relativa invisibilidad y vida oculta del Consell „que no ha impedido la consolidación de Ximo Puig como un dirigente cálido, cercano, un factor de estabilidad„, es la mejor prueba, a contrario, de la perentoria necesidad de unos medios propios o participados, o mixtos o como sean, mientras se despeja el avispero jurídico de Canal 9 y se abren los platós. Modesta y utilitariamente. La lucha ideológica es como limpiarse los dientes: hay que practicarla después de cada sobremesa. Sin temor y esta vez sí, un pelín de orgullo: sin llegar a Julio Anguita. Movilización general contra la desastrosa financiación de la autonomía.

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