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El Cristo del barrio que cultivaba la "xedrea"

Sant Bult es propiedad de los vecinos del barrio, guardado en el Hogar Sant Bult, que no permite que el santo «duerma» en ninguna iglesia

Los Cristos suelen pender de la cruz desnudos y coronados de espinas, éste está vestido con túnica y por corona una tiara pontificia, su altura es de tres palmos, a sus pies tiene un cáliz, de estilo románico y datado en el siglo XIII. En su honor se celebra la fiesta cristiana más antigua de las que tiene la incansablemente festera ciudad de Valencia.

Se trata del Sanct Bult, del latín Vultu Christi, rostro de Cristo que en Lengua Valenciana adaptamos con «b» para hablar de toda la figura o santa imagen de Cristo, advocación que remite al de Luca en Italia de la que se dice esculpió el mismísimo discípulo de Jesús Nicodemus.

La imagen fue hallada, dice la piadosa tradición, de manera mistérica en el subsuelo de una casa del barrio el mismo año de la reconquista jaimina. Es por lo tanto una imagen de reconquista, de las que llevaban encima los cristianos que iban arrebatando pueblos y ciudades a los muslimes y se empeñaban en cristianizarlos a base de Cristos según una teoría o que tal vez fuera venerada en la ciudad por los mozárabes que vivían en ella durante la dominación islámica, la cual debió ser escondida en la última etapa de la hegemonía, que fue más radical y violenta contra los valencianos de religión cristiana, apareciendo o siendo descubierta ya tomada la capital por Jaime I. Sea lo que fuere, la imagen está datada y documentada ya en el siglo XIII.

Su propietario Manuel Navarro la entregó al núcleo poblacional cercano a la puerta de la muralla árabe conocida por la Xara, dedicados sus moradores al cultivo y comercio de una planta medicinal muy potente llamada Ajedrea, Xedrea en valenciano, conocida también por herbes d´ olives, cuyas propiedades antisépticas, antibacterianas, antivirales, antioxidantes, estomacales, expectorantes,€ servían para curar o paliar casi todos los males, principalmente los digestivos, la gota, el reuma, el asma, herpes labial, diarreas, eccemas, próstata, boca, garganta,€

El lugar por influencia de su huerta acabaría llamándose con el topónimo de Xedrea, que la evolución lingüística popular haría derivar a la Xerea, nombre que aún conserva el barrio.

Esta tradición de la medicina natural de la farmacopea valenciana aún perdura, aunque no con la fuerza que debiera y por la habituación que se tiene de resolver todo con pastillas que tanto enriquecen a los laboratorios farmacéuticos. Pueden probar sus bondades, por ejemplo, colocando una pizca de Ajedrea o Xedrea en una taza, hirviendo el agua dos minutos y dejándola reposar otros tres, filtrado el contenido tómese o úsese.

El Cristo que nos ocupa hoy es propiedad de los vecinos del barrio, guardado y custodiado en el Hogar Sant Bult, un centro social que fue escuela, cine, teatro,€ y hoy es casa de educación cultura popular con especial atención a los niños de la zona. Los estatutos de la sociedad no permiten que el santo «duerma» en ninguna iglesia, no sea que se lo quiten a la vecindad, y sólo permiten que lo haga fuera de casa una noche al año, la víspera de su fiesta, para asistir a la solemne Misa que en su honor le hacen en la Iglesia de Santo Tomás, este año el domingo 5 de junio a las 10.30, y por la tarde a la procesión, a las 18 horas, que recorre todas las callejuelas del lugar, culminando el recorrido en un emotivo acto en la plaza de su nombre.

El pregón de la fiesta lo pronunciará en el templo parroquial la Decana de la Facultad de Geografía e Historia, la doctora Ester Alba Pagán, el cual por ser historiadora se prevé muy documentado, el sábado a las ocho de la tarde. El resto de días, desde jueves a lunes, las jornadas están repletas de actos diversos, entre ellos el lunes un concierto de la banda de música de Cortes de Pallás, que es la histórica titular musical de estas fiestas.

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