No ha sido el fichaje de Santiago González trending topic en las redes sociales ni habrá entrevista en prime time en la que Gloria Lomana explique al detalle las causas de la despedida como en el Deluxe que le montaron a Mercedes Milá en Telecinco.
Algunos han comparado la salida de la que ha sido trece años directora de los servicios informativos en Antena 3 con la de Christiane Amampour de la CNN subrayando que en Estados Unidos no se comentaron sus circunstancias conyugales. Confieso que no recordaba quién es el marido de la madrileña pero sí su última entrevista a Mariano Rajoy, por ejemplo. No sé si Lomana ha tenido que demostrar que la etiqueta de su vestido es irrelevante pero nunca las crónicas alabaron su brillante pregunta al político que tenía enfrente. A ella le debemos la exhaustiva cobertura de Venezuela y la «exclusiva» de la relación de la CUP, Podemos y el entorno de ETA con el gobierno de Nicolás Maduro.
Lo cierto es que los informativos de Antena 3 han ido perdiendo audiencia hasta situarse por debajo de la media de la cadena. También en los especiales y coberturas electorales han quedado relegados, siempre por detrás de La Sexta. Hasta el sangrante cuarto puesto en el seguimiento del Debate a 4 del 13J.
El nuevo director general quiere mejorar sinergias con el equipo de La Sexta Noticias que lidera otro González, César, con los que no mantenían apenas relación. Incluso llegaron a no citarles al hablar de los Papeles de Panamá. Tendrán que afinar mucho la línea sin pasarse en su «sextización» porque al grupo le interesa mantener la diferencia y no dinamitar lo conseguido por la emisora verde. Quizás apuesten por el estilo Piqueras, menos comprometido ideológicamente, más rentable. Estaremos observando.
