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Con cuatro basta

«Velvet» dirá adiós a la parrilla de Antena 3 con su próxima temporada. Será la cuarta y la última. La gran apuesta de la cadena de Atresmedia ha sabido sacar el partido justo y necesario a la historia de amor entre Alberto (Miguel Ángel Silvestre) y Ana (Paula Echevarría).

La ficción se ha colocado con cada capítulo de estreno entre lo más visto de la jornada. Cierto es que, como suele ocurrir, con el paso del tiempo la serie ha ido perdiendo adeptos y llegados a este punto ha dicho «basta». No es que la audiencia haya caído en picado, que no es el caso, sino que hay que saber dejar la historia en el lugar que se merece, por ella misma y por la audiencia. Por respetar un buen contenido y evitar que sus seguidores caigamos en el hastío y en la tentación del mando a distancia.

Ana y Alberto han pasado en estas temporadas „por ahora tres, la cuarta llegará en septiembre„ por su amor imposible, bodas no deseadas, embarazos y desapariciones que, para la cadena, parecen ser más que suficiente.

A Atresmedia no le gusta que sus formatos estrella „«Vis a vis», «Bajo sospecha», «Velvet»,...„ se alarguen en el tiempo. Es una decisión valiente, aunque a veces difícil de digerir. En el caso de «Velvet», aunque me pese, es acertada. Con cuatro basta. Alargar la historia sería estirar el chicle innecesariamente. Resuelto el romance, resuelta la historia. Menos comprensible ha sido la decisión en la trama de «Vis a vis», que aún podría haber contado con una tercera entrega o con «Bajo sospecha» que, al presentar casos diferentes en cada temporada, cuenta con menor riesgo de desgaste, sobre todo después de prescindir de la insípida Blanca Romero (si alguien le encuentra registros „caras„ diferentes que me lo demuestre con pruebas, audiovisuales preferentemente).

El mes que viene veremos si las galerías cierran como Dios manda o nos hacen un «Vis a vis».

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