La Sexta ha decidido este verano que el artista más completo de España sea un acróbata. Y no lo han dicho en programas de política refiriéndose a la investidura sino en Eso lo hago yo, el enésimo talent show de la parrilla. Se agradece la valentía de estrenar en agosto, no solo de Juegos Olímpicos vive el televidente, pero también se intuye cierta falta de fe en la propuesta antes siquiera de verla. Y tras el primer programa la sospecha queda ampliamente confirmada.
A los mandos de la nave está Carlos Sobera, ave fénix de la ceja en alto, viviendo un momento televisivo tan dulce que a la misma hora del estreno en La Sexta está también en Cuatro, haciendo doblete como casamentero de First dates, su exitoso restaurante de primeras citas. Le acompañan en la aventura cazatalentosa tres jurados, cómo no: el siempre dispuesto David Bustamante, la polifacética Silvia Abril y el coreógrafo Giorgio Aresu, ¿se acuerdan de él? La veteranía es un grado para los que aún lo ubicamos como bailarín de guardia en todos los ballets de Televisión Española en los ochenta: enjuto, ceñido y con la melena rubia en danza. Está igualito, ahora disfrazado de Risto con unas gafas de sol y pose de duro para ejercer de poli malo pero no tanto.
El hecho diferencial de Eso lo hago yo es que los concursantes pasarán pruebas de disciplinas que no son las suyas. Las suyas son el canto, el baile y las acrobacias, sobre todo las acrobacias. El programa gusta del derroche físico y arrancó nominando a las tres cantantes, para que quede claro. Como la mitad del elenco no brilla demasiado en su especialidad no les auguramos grandes prodigios. No es tampoco momento para grandes exigencias y menos si comparamos con los portentosos atletas olímpicos, así que nos conformamos con un espectáculo entretenido que casi podría ser familiar si alguna aspirante no cantara desnuda o la jurado Silvia Abril no se abalanzara a bromear sobre todos los bultos de la anatomía del concursante más macizo. El nivel artístico de los invitados sí es notable y variado, tanto que ahora canta Marta Sánchez y luego tres chicas demuestran que mover el culo es una especialidad de baile. Como verán, no hace falta tomárselo demasiado en serio. Al fin y al cabo la televisión casi siempre es un seguido de varietés.
Lío en Río. Casi tanto como las medallas brilla la desorganización en estos Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. También se quejan los espectadores de TVE de la selección de las emisiones deportivas en directo. No está fácil con estos horarios. En esto también manda la tele que más paga, que es la NBC norteamericana y nos queda lejos.
