El barrio de Orriols tiene su origen en la alquería andalusí de Rascanya que el rey Jaume I donó a Guillem Aguiló. Más tarde formó parte del señorío de Rascanya. A finales del siglo XIV pasó a formar parte de las posesiones del aristócrata Pere d'En Oriols, Procurador General del Ducado de Gandía. A su muerte, el territorio pasó a ser administrado por el prior del monasterio de San Jerónimo de Cotalba situado en la localidad de Alfahuir, cerca de Gandía. Entonces cambia de nombre la alquería y pasa a ser conocida como alquería de En Oriols. Cuando deja de ser señorío, se convierte en municipio independiente con ayuntamiento propio. Hasta el siglo XVIII era el prior de Cotalba el encargado de nombrar a los alcaldes y regidores. Se mantiene como municipio independiente hasta 1882, momento en que, junto a Benimàmet, fue anexionado por la fuerza y sin su consentimiento al municipio de Valencia.
El viejo barrio de Orriols, forma parte del distrito de Rascanya. Entre los años 1960 y 1970 se edificó un centenar de pisos conocidos como Casas de Barona, en referencia al arquitecto que las construyó. Estas viviendas se destinaron a albergar a personas procedentes de Extremadura, Andalucía y Castilla la Mancha. Durante años estas viviendas fueron ocupadas por personas de etnia gitana y familiares de presos de la cárcel de San Miguel de los Reyes.
Durante los últimos treinta años en Orriols no se ha realizado ninguna inversión destacable. El barrio conserva su origen humilde y una elevada presencia de población inmigrante . Existen viejos problemas que no han sido resueltos , como el denominado «agujero de la vergüenza», una pequeña gruta excavada por los vecinos, que comunica la calle Agustín Lara con la calle Baeza.
La Asociación de Vecinos de Orriols denuncia sistemáticamente las múltiples deficiencias existentes en el barrio. En los últimos años la población extranjera ha crecido mucho . Mientras que en 2005 un 16% de la población eran extranjeros, en 2014 el porcentaje que ascendió al 30% . Investigadores como el antropólogo de la Universidad de Valencia y experto en migraciones, Albert Moncusí, ha realizado varios estudios sobre Orriols que se han centrado en estudiar aquellos indicadores que miden la posible situación de vulnerabilidad , tales como la tasa de paro, la alta temporalidad y el bajo nivel de estudios. Por este motivo este barrio ha sido incluido en el Atlas de la Vulnerabilidad Urbana en España en varias ocasiones.
Recientemente la Universidad de Valencia en colaboración con la concejalía de Acción Cultural del Ayuntamiento de Valencia, ha convocado, por segundo año consecutivo, el programa «Emergentes», destinado a fomentar proyectos de creatividad, innovación e inclusión sociocultural. Tres entusiastas jóvenes universitarios están llevando a cabo una interesante experiencia con un grupo de jóvenes de este barrio. Sus familias proceden de diferentes países , son de distintas razas y profesan credos también diferentes. El trabajo de estos jóvenes va a consistir en centrarse en conseguir una mirada positiva de sus calles y de sus gentes.
Cada sábado, durante las próximas semanas, van a salir a fotografiar las mejores imágenes de su barrio. Al final, entre todos elegirán las doce mejores fotografías, aquellas que promuevan una mirada positiva del lugar donde viven. Auténtico autorretrato de Orriols construido desde el respeto hacia todas las personas que lo habitan.
