En uno de esos lugares en los que gastamos el dinero «en alcohol y mujeres» han vivido estos días su televisiva dosis de sexismo, machismo y xenofobia. Resulta que no solo a Donald Trump le gustan las mujeres del Este, a los italianos también; tanto como para que se las califique de amenaza en un coloquio sobre «el fenómeno» de estas féminas y la fascinación que producen en los hombres», aunque no estén muy claros los límites geográficos a los que se refieren.
A la presentadora de «Parliamone... sabato», programa similar al desaparecido «La Noria» o el actual «Sábado Deluxe» pero en horario vespertino, le interesaba mucho la opinión de uno de los invitados, Fabio Testi, «única persona autorizada para hablar del tema porque ha estado con mujeres del Este maravillosas, como Anita Ekberg». El actor ha de precisar que no era «tan del Este, era sueca» y ofrece su punto de vista de experto: «No son una amenaza sino un regalo, porque son diferentes, rubias con ojos azules». «¿Y qué pasa conmigo?», salta indignada una miss italiana allí presente con una larga cabellera dorada.
El galán de 75 años pasa entonces a las diferencias culturales. «Muy importante», las prefieren rubias y extranjeras porque si «por casualidad» el italiano tiene alguna dificultad en la «aproximación final», la culpa es del hombre. Pero si una rusa ve que el varón no puede alcanzar el orgasmo, es ella la que se siente culpable. La feminidad se entiende de otra manera». Como lo leen.
Por ahí siguió el debate analizando los 6 motivos por los que los italianos eligen una compañera del Este: son todas madres y después de haber parido recuperan un físico «marmóreo»; son siempre sexis, nunca van en pijama; perdonan la traición; están dispuestas a dejarse controlar por sus maridos; son perfectas amas de casa; y no lloriquean, no son pegajosas ni guardan rencor. El lunes fue cancelado de forma fulminante porque «Parliamo...sabato» se emitía en la televisión pública, la RAI1. Su director, Andrea Fabiano, presentó una disculpa oficial, definiendo lo ocurrido como «un error loco e inaceptable».
Sin tener en cuenta las reflexiones de un carcamal como Fabio Testi y conociendo el funcionamiento de estos «talk show» sensacionalistas líderes de audiencia que sacian nuestras mentes de morbo y conflicto, causa cierta desazón pensar cuántas mujeres piensan así de los hombres o cuántos de ellos realmente quieren hoy en día damas limpias y sumisas, rubias a ser posible.
