Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Crecer de éxito

Como uno de esos adolescentes que de pronto da el estirón y se convierte en un fornido galán, así ha sucedido con Joyería Siete, que en junio cumplió siete años y ya festejará el octavo cumpleaños en su novísima sede de la calle Hernán Cortés, 28. Antes, por supuesto, ha celebrado el traslado por todo lo alto y con acompañantes de cartel. Mujeres notables como Rosa Lladró, Dolores Cortés, Isabel Cosme, Amparo Ortuño, Mª Dolores Enguix, Luz Aguiló, Mª José Albert y Amparo Brull. Del lado masculino: Antonio Novo, el Dr. Enrique Gastaldi, Josep Lozano, José Manuel Mesado y Antonio Meco. Y por parejas: Iván Martínez-Colomer y Ana García Rivera; Pedro Hernández y Marisa García Forte, y los hermanos Mª José y Juan Antonio Murgui.

La ocasión era importante. En su primer emplazamiento de la calle Lauria, la Siete abrió una vía muy personal al mundo apasionante de las joyas creativas. Pero su potencia y aceptación precisaban ensancharla para respaldar adecuadamente la actividad del oficio y la recepción a la clientela. Todo esto se consigue en la recién estrenada ubicación. Casi 250 metros cuadrados de superficie han permitido incorporar el taller, a la vez que, mediante airosas «jaulas» de barrotes de bronce se delimitan espacios privados para la atención al público. Esos tubos broncíneos se repiten en un escaparate, marcando las plataformas que exhiben distintas piezas, mientras que en el otro escaparate abren un espacio central, reservado a la joya estrella de cada momento. Y la que luce ahora es excepcional. La sortija «Carrusel», inspirada en una atracción ferial del Montmartre de los años 20 (etapa en la que se armonizó la inauguración del local) lo evoca mediante una aguamarina de talla especial como plataforma con columna central iluminada por diamantes. Un dosel de rubíes y diamantes blancos del que cuelgas animalillos de oro rosa y diamantes de colores simula las figurillas del tiovivo, y el aro de la sortija es una réplica diminuta de la Torre Eiffel. Un video alternando imágenes del París «Belle e´époque» con primeros planos de la sortija hizo apreciar al detalle su original belleza. Y para mayor ambientación corrió en abundancia el mítico champán Veuve Clicquot, símbolo incontrastable de la época rememorada. Por si fuera poco, a la nueva tienda se añade otro lujo: el fondo, un patio interior en el que se yerguen limoneros y olivos, como un recogido jardín mediterráneo del que emana luz y verdor.

Ni que decir tiene que Guillermo Martorell y Mamen Puchades con sus hijos Pablo y Arantxa fueron perfectos anfitriones de la concurrida fiesta.

Compartir el artículo

stats