Celebrado el congreso del PPCV se observó poca ilusión y brillantez, habiendo fallado personas relevantes y asistentes a anteriores eventos. Era normal que así fuera, pues la gente no olvida que en la época que gobernó en nuestra comunidad se cerraron la CAM, el Banco de Valencia y Bancaja, de la que se dice ahora que no había motivos suficientes para ser absorbida por Caja Madrid; pero se fundó Bankia, con el resultado por todos conocido. Se dejó el domicilio social en Valencia, pero el fiscal está en Madrid que es donde deja impuestos.

En la misma época se cerró RTVV sin ser capaces de reestructurar la empresa despidiendo al personal sobrante que había entrado casi todo a dedo y consensuando con los otros partidos y sindicatos otra fórmula más inteligente y menos costosa. Aun sabiendo que había gente contenta con esta desaparición, creo no se valoró el daño que se hizo a todos, fuesen de la tendencia que fueran.

Por todo lo anterior, esperaba que el presidente pidiese disculpas, y además ofreciese la dimisión del ministro Cristóbal Montoro, que ha sido nuestro peor enemigo en sus actuaciones. Da la sensación de que su objetivo para nuestra tierra ha sido que perdiese la consideración de Levante feliz y tercera comunidad, y con este dinero favorecer especialmente a Madrid y otras zonas.

Junto a Montoro, yo añado a Ana Pastor, a la cual he calificado en otros artículos como la mejor alcadesa de Madrid en toda la democracia. Junto a lo anterior debía haberse explicado algo sobre la destitución de García Margallo y el hecho de no contar con ningún ministro valenciano. Creo que merecemos algo mas de Mariano Rajoy que venir a Valencia junto a sus colaboradores solo a implorar los votos sin ofrecer nada. No hacen más que perjudicar a España.

Y pasados unos días del congreso, llegaron los presupuestos y, efectivamente, no ofreció nada. El presidente ya sabía lo que nos esperaba mientras prestigiosos periodistas de Madrid han denunciado la situación del Corredor Mediterráneo, así como las líneas férreas Sagunt-Zaragoza-Cornisa cantábrica y los puertos de Sagunt, Castelló y València; y principalmente el AVE a Barcelona y la frontera francesa.