Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

40 años del grup de mecha

Hace 40 años, un grupo de valencianos avergonzados del deterioro de la tradicional y singular procesión de Corpus Christi, arrebataron a los pordioseros que contrataba el Ayuntamiento para llevar los cirialots, se revistieron con sus túnicas y comenzaron a dignificar en su parte popular y externa la solemnidad.

La Asociación Grup de Mecha, que preside Horacio Castelló Taliani, celebró la efeméride con solemne Misa, casi concierto por la calidad del coro, una Misa en la Iglesia de san Martín, oficiada por el párroco y capellán del grupo P. Mariano Trenco, y posteriormente se reuniró en un almuerzo de hermandad en el Ateneo. Al término de la Misa se impuso las insignias de oro a los fundadores o descendientes y en el almuerzo las insignias de la entidad a los más jóvenes y colaboradores, entre eñllos quien esto escribe y el maestro de la fotografía de lo valenciano, Antonio Cortés.

El Grup de Mecha fue el inicio de la recuperación del singular cortejo religioso barroco y mediterráneo de la festa grossa de la Ciutat, el aparato festivo por excelencia de Valencia desde sus orígenes en 1355. Ellos mismos serían los fundantes, en 1977, de la Associació d´Amics del Corpus, que integra a los figurantes de personajes bíblicos de la procesión, de los que el Grup de Mecha ha sido la parte intelectual e investigadora, la menos folklórica.

Fue fundamental en dicho resurgimiento la labor callada y efectiva del canónigo e historiador don Vicente Castell Maiques, del escritor e historiador Manuel Andújar y del asesor de fiestas del Ayuntamiento de Valencia, Josechu Rey de Arteaga,-sus dos sobrinas recogieron su insignia póstuma- y del canónigo José Climent Barber, recientemente fallecido. Todos ayudarían a elevar la procesión al nivel que tuvo en momentos álgidos de su historia.

Els Cirialots son 26 reyes, vestidos de túnicas blancas, con barbas y pelucas de crin, ceñidos de corona dorada en la cabeza y un tahalí de terciopelo rojo carmesí. Junto con La Moma, es icono del Corpus valenciano. En un principio se les llamó Ancianos y comenzaron llevando ciriales que pesaban dos arrobas, los cuales estaban adornados con las Insignias de la Ciudad, por ser una fiesta patrocinada por el municipio, y representan a los ancianos que vio el Evangelista San Juan en el Apocalipsis adorando al Cordero eucarístico del sacrificio.

En 1380, por primera vez aparecieron figurantes o actores de personajes bíblicos en la procesión. En el Manual de Consells de aquel año consta que iban persones qui ab esturments de cordes ab cares cubertes anaren sonant devant lo corpus cristi dementres dura la dita proceso. Eran músicos y cantores, que recuerdan los cantos y danzas del Rey David ante el Arca de la Alianza.

En 1383, aparecen por primera vez els cirialots, 12 personajes, 12 prohombres de la ciudad, llamados ancianos, con cirios enormes portats devant lo cos precios de Jesucrit en lo dia de corpore cristi durant la processo. En 1456, vendría la ampliación de cirialots al ser incorporados 12 ancianos más a los 12 existentes en la procesión con motivo de haber declarado el rey Juan ii de Aragón el Misterio de la Concepción de María en los territorios de la Corona de Aragón.

Compartir el artículo

stats