Es facilísimo tener al enemigo en casa. Ante propuestas de gremio, ciertos "compis" esgrimen sarcasmos justificando su abstención. "Hay gente que cree que el toro se estresa, yo le diría que es verdad. No soy veterinario, pero no me extraña que así sea pero fíjate lo que se estresará quien está trabajando en agosto al sol. Entonces, que prohíban trabajar en agosto y que pase toda la gente a un fondo salarial. Los humanos se estresan porque quieren, dicen. Porque quieren no, porque han de ganar un jornal", ("Europa Press Valencia", 05/08/2017), apuntó el concejal de Hacienda en el Ayuntamiento de Valencia, el socialista Ramón Vilar. "Compis", en diversos ámbitos, con obtusos fines sociales, resuelven con heridas, físicas y anímicas. Lacerantes son los casos de saqueo a confiados mayores, avaladores bancarios de hijos, hijas, nietos o nietas que, por tarambanas o desafortunados, no hacen frente a la deuda. "Compis" de apego familiar que presionan sentimentalmente a sus víctimas para después, ante el impago, causarles desasosiego, pérdida de salud y de bienes. Francisco Rosales, notario, alerta, "padres jubilados cuyas pensiones se embargan por avalar al hijo, o cuyas viviendas se ejecutan por dichos avales es algo que está a la orden del día". Erich Seligman Fromm en "El corazón del hombre", apuntaba: "No debemos confiar en que nadie nos salve, sino conocer bien el hecho de que las elecciones erróneas nos hacen incapaces de salvarnos".

Una sustanciosa nómina de "compis" pululantes, asiduos a clubes extremadamente privados, superan la escabrosidad más contumaz. "Te escribí cuando salió el artículo de los de las tarjetas en la mierda de LOC y ya sabes lo que pienso, Javier. Sabemos quién eres, sabes quiénes somos. Nos conocemos, nos queremos, nos respetamos. Lo demás, merde. Un beso compi yogui (miss you!!)", ("elespañol.com", 21/04/2027). El escritor y periodista francés Pierre Daninos, en su libro "Snobissimo o El deseo de parecer", echaba un cubo de agua fría sobre testas elitistas con disquisiciones tales como: "Mientras que en los últimos peldaños de la pomposa escala social algunos retrasados se esfuerzan torpemente en trepar, los que agotaron los peldaños ya emplean expresiones del bajo pueblo".

Existen "compis" que apelan a supuestas diferencias de calidad humana para disfrutar de parabienes en nada democráticos, no sostenibles ni filosóficamente. Fernando Savater habla de la "etnomanía" consistente en "conceder primacía a lo genealógico, lo lingüístico, lo religioso o las ideología tradicionalistas sobre la igualdad constitucional de derechos: identidad étnica frente a igualdad ciudadana"; de tal manera que se crean cuadrillas de "compis" capaces de cualquier cosa por pasión, por dinero, por orgullo, por poder, por dejar de ser un homínido peludo, denominado Homo por el científico sueco Carlos Linneo, en mil setecientos cincuenta y ocho. Un Homo peludo que, al igual que el tinerfeño hijo de menceyes guanches, Petrus Gonsalvus, mudó a privilegiado al ser "compi", acogido, de Enrique II de Francia. Actualmente, el síndrome del hombre lobo, padecido por Gonsalvus, no está de moda, hace furor la depilación como salvoconducto social.

Manipulaciones soterradas de "compis" han existido, existen y existirán; el que fuera presidente de Gobierno, Adolfo Suarez, inauguraría entre "compis" una nueva época del funambulismo nacional y, entre "compis" dimitió; "siempre había dicho, casi con insistencia, que a él no le harían lo que a Carlos Arias, que a él no le pediría nadie la dimisión, que él se marcharía en cuanto intuyese el menor "guiño" del Rey", "mi misión, decía siempre a sus amigos y a algunos de sus ministros, es asentar la Monarquía, pero no la Monarquía de Don Juan Carlos, sino la Monarquía de Don Felipe", ("Conspiración contra un presidente", José Oneto).

Amigos y amigas, "compis" de toda la vida, no titubean a la hora de usurpar quereres o ilusiones, o autorías creativas, o reconocimientos; "momentos dolorosos para el afecto e inteligencia eran aquellos en los que cualquier singular idea, su amiga la hacía propia, por lo que, cara al público, pasaba a ser simple comparsa herida de rabia y sorpresa pudiendo solo callar". Coco Chanel al conocer al perfumista Ernest Beaux le pidió, "nada de efluvios de rosa ni de lirio, lo que yo quiero es un perfume compuesto. El perfume natural de una flor es artificial en una mujer. Quizá haya que crear artificialmente un perfume natural"; más tarde, dicho perfume bautizado como Nº5, sería emblema de sensual elegancia; un número como astucia creativa sumada a otra gran idea de Coco Chanel: embotellarlo en frasco cuadrado. La sociedad de Les Parfums Chanel, S.A creada junto los "compis" Wertheimer recogía una funesta claúsula contractual mediante la cual, Coco Chanel, cedía sus derechos a la sociedad: "todos los perfumes que se vendan normalmente bajo el nombre Chanel, las fórmulas de propiedad de la producción, métodos y diseños cuyos derechos le corresponden a ella, así como el derecho exclusivo de la mencionada compañía a fabricar y vender bajo el nombre Chanel todos los perfumes, productos de belleza, jabones, etc.", ("Coco Chanel", Axel Madsen). "Compis" de negocio, sumamente enrevesados para éticas lineales.

En la epopeya conquistadora española existieron ejemplos de "compis" que, subordinados a igual empeño, bajo la misma bandera, se convirtieron en contrincantes. El hidalgo metelinense Hernán Cortés y el palermo Gonzalo Guerrero, se enfrentaron en la batalla por Yucatán; el propio Cortés dictaminó sobre el renegado: "En verdad que le querría haber a las manos porque jamás será bueno", ("Despierta y lee", Fernando Savater).

En el deporte también hay "compis". Vitaly Stepanov, ex agente antidopaje ruso, denunció tramas de dopaje nacionales junto a su mujer Yuliya Rusanova, atleta olímpica que le puso al corriente de habituales usos por parte de preparadores: "¿Conoces algún entrenador que me permita competir sin doparme? Eres un idiota, la RUSADA nos ayuda" ("Acento Robinson" SER). Yelena Isinbayeva, otra "compi" del deporte ruso declaró: "Que los atletas pseudo-limpios ganen pseudo-medallas sin nosotros" ("epdeportes.es", 27/01/2017).