Me llevó el azar el otro día a revisitar un edulcorado spot de esos que dan por la tele en Navidad. Es de una marca de salchichones y otros derivados cárnicos. Pese al tono un tanto meloso del anuncio, está dirigido con brio por Izíar Bollaín e interpretado con oficio por un puñado de nuestros mejores cómicos. De entre todos destaca su brillante protagonista: la añorada Chus Lampreave. Tal vez lo recuerden, se llamaba 'Hazte extranjero' y recorría algunos lugares comunes de los españoles que al tiempo son, mal que nos pese, seña de identidad. Más allá de si gustó mucho o poco nos dejó para la reflexión la siguiente cita: "Uno puede irse, pero no hacerse". Ahí la dejo al ocioso lector para que le de una vuelta, tiene miga y más en estos tiempos.
La cosa va de indepes, sí. De independentistas famosos, de los más populares para el personal por su condición de "salir por la tele".
El primero de ellos se le recordará ( no se si a su pesar) como "el rubio de la Trinca". Josep Maria Mainat es un twitero muy activo en cuyo avatar (esa imagen en círculo que identifica la cuenta) aparece guitarra en ristre cual Springsteen de Canet. Atiza en las redes de lo lindo con reflexiones como esta: «¿no veis la jugada? Si el TC suspende la suspensión.. patapam!! Independientes!!». Siempre tuvo sentido del humor este Mainat y una prominente barbilla. Muchos le retraen que ya le vale ser indepe y multimillonario, como si fuera necesariamente incompatible (véanse Guardiola o Piqué). Antes de amasar toda esa pasta (que sin duda tiene) tuve la oportunidad de compartir con él y con el resto del equipo de Gest Music algunos programas que produjeron para Canal 9. Eran los años 90, por aquí andábamos aprendiendo sobre la marcha a hacer televisión mientras ellos lo tenían muy claro. Mainat reaccionó de manera airada a aquella controvertida lista que se llamó 'Las 500 palabras prohibidas'. Amadeo Fabregat, Director General de Televisión Valenciana por aquellos días, ordenó la elaboración del infausto listado en el que figuraban 500 palabras que resultaban al parecer «demasiado catalanas» y se ordenaba su eliminación de toda noticia, reportaje o intervención. Por poner un ejemplo: se debía eliminar "revolta" y sustituirla por "sublevació". Revolta fue la que se lió con aquel polémico asunto en el que anduvo envuelto Lluís Fornés. conocido como 'El Sifoner'. del que seguro recuerdan su "mànec de tres pams i mig".
Otro indepe de postín, anque su revelación causara más sorpresa, es Eduard Punset (aunque ahora para anunciar el pan Bimbo tenga viajar a la Castellana). Un tipo capaz de entrevistar en sus 'Redes' al mismísimo bosón de Higgins e invocar a los ectoplasmas, se destapó independentista. Con su hablar afable y esa imagen conciliadora de enorme parecido con el hermano mayor de Art Garfunkel se autoproclama "indendentista sin fronteras". Pero ser nacionalista ¿ no va de poner más fronteras?
En su día también hubo quien se sorprendió del independentismo de Juanjo Puigcorbé, a la sazón regidor de Esquerra Republicana i diputat de Cultura. En el caso de Puigcorbé se da la paradoja de haber interpretado al emérito Rey borbón en una de las peores series históricas que se recuerdan. 'Felipe y Letizia' en Tele 5 fue un bodrio de cuidado y la interpretación de Puigcorbé una caricatura grotesca. Ahora lo entiendo, es republicano de pura cepa.
Aunque para republicana e independentista pintoresca Karmele Marchante es sin duda mi favorita. No se la pierdan en Interviú posando envuelta en la «estrelada», llamando a la desobediencia civil y a que quemen los bancos. Con lo que tiene llorado en 'Sálvame' por cualquier chorrada del colorín, que ahora se declare indepe y masona tiene un punto surreal que me fascina.
