El ambiente de veranillo de las últimas semanas se esfuma definitivamente después del cambio de tiempo de este fin de semana. El viento llega ahora del norte y eso cambia la situación. En las zonas costeras del Mediterráneo habrá momentos muy agradables durante el día, pero tierra adentro las comarcas interiores tienen a la vista su primera semana de frío. Salvo en Baleares y algunas zonas del extremo norte peninsular las precipitaciones tienden a desaparecer y, de momento, no hay perspectivas de grandes temporales de lluvia. No obstante, a lo largo de esta semana se podrían repetir algunas nevadas como las de este fin de semana en los Pirineos y Sierra Nevada. El viento del norte aún será protagonista en las próximas horas en Baleares, el norte de la Comunidad Valenciana y Cataluña. Este cambio que hemos tenido explica en buena medida la diversidad de tiempos que tenemos en España, una encrucijada geográfica que recibe masas de aire de todas las procedencias. La continua llegada de aire desde el sur durante varias semanas ha mantenido los termómetros por encima de lo que cabe esperar en pleno otoño, pero ahora, al rolar al norte, nos damos cuenta de que estamos en pleno noviembre y con las navidades a la vuelta de la esquina. En los pueblos del interior ya saben que si calma el viento helará por la noche. Eso, a estas alturas, es más lógico que la perseverante bonanza que hemos tenido en octubre.