Los modelos meteorológicos, como el GFS, el WRF, el GEM, el HIRLAM, el Modelo Europeo (ECMWF) son unas herramientas fantásticas que ayudan a los meteorólogos a prever el tiempo hasta diez días con una fiabilidad bastante buena. Sin estos modelos no siempre hacen pronósticos fiables, y algunas veces se equivocan, al igual que el resto de las personas.

Es aquí donde la experiencia del meteorólogo y su intuición favorecida por sus conocimientos, y siempre combinados con la experiencia, pueden ayudarle a hacer una previsión más afinada que los modelos, especialmente en situaciones meteorológicas con tiempo muy inestable y cambiante, precipitaciones intensas, paso de frentes activos, nevadas, vientos intensos, etc.

Sin embargo, la sociedad actualmente reclama mejores previsiones, horarias y en un lugar determinado, a menudo lejos de la zona donde hace la previsión el meteorólogo. Es imprescindible que un meteorólogo se vaya reciclando continuamente y aprenda nuevos conocimientos de meteorología, y además tenga en cuenta la climatología de la zona para hacer una previsión meteorológica fiable.