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Errores

Los errores son esos fallos humanos que pueden ser tan normales como garrafales. Algunos cuestan una carrera política, pregunten a Cristina Cifuentes, si bien es cierto que entre la clase política abundan los errores, los errados y los errantes. Puede decirse que tanto la Cámara Alta como la Baja, son auténticas cámaras de los errores. Pero la televisión nos tortura con errores garrafales. En el tortuoso Sálvame Limón, de Telecinco, la exgraciosa Paz Padilla dijo que el cantante Juan Ramón era hermano gemelo de Francisco. Informada está la buena mujer.

«No sabía que Francisco tuviera un hermano gemelo», dijo Paz. Nosotros tampoco. Ambos cantantes valencianos son hermanos, sí, pero mientras Francisco nació en Alcoi, Juan Ramón lo hizo en La Vall D´Uixó, unos años después. Rarísimo caso de parto de gemelos que debería figurar en los anales de la ciencia e incluso en el Guinness. Paco y Juanra son tan gemelos como Bertín Osborne y Arévalo. Juan Ramón intervino en el programa telefónicamente por la participación de Francisco en el reality Supervientes, y se dice que es el concursante que más cobra por ello.

Como siempre, las lindezas que Juanra prodigó sobre su hermano fueron un tanto fuertes, pero habituales entre ellos, si bien Juan Ramón puso a caldo a su cuñada, Paca Ribes, acusándole de ser la causante de la ruina de Francisco y la nula relación de su hermano con la familia. Guardo una relación amistosa con ambos cantantes y como ya dijo Cervantes en El Quijote, «al buen callar llaman Sancho».

Otro error de bulto, uno más, el de ese chico catalán, de origen independentista, que va a representar a España en Eurovisión junto a su novia y ya están en Lisboa a la espera de ¿españolear? Alfred García, que así se llama el muchacho, regaló a su novia, Amaia Romero, el tradicional libro y rosa en el Día de sant Jordi, patrón de Barcelona. El susodicho libro se titulaba España de mierda, original del intelecto Albert Plà, y Alfred colgó la foto mostrando el libro en Instagram. Carlos Herrera dijo en la radio que «a este chico le falta un hervor». ¿Solo uno? Como siga con estos errores antiespañoles va a actualizar el título de una vieja y gran película, de Sam Peckinpah: «Quiero la cabeza de Alfredo García».

No fue un error que la niña soprano de L´Eliana, Melani, fuera la primera en pasar a semifinales de La Voz Kids, volviendo a dejar alucinados a público y famosos jurados que ya le llaman Mini-Callas. Hasta el divino David Bisbal, contratado en esta fase del programa como juez máximo, quedó prendado y prendido con las facultades de esta pequeña diva, que avanza paso a paso para alzarse con el triunfo final, salvo error u omisión.

Y sí será un gran error no acudir a disfrutar la semana mágica del Olympia, donde esta misma noche y la tarde de mañana, martes festivo, dará su habitual clase magistral el maestro Juan Tamariz, mientras que el miércoles será el gran profesional castellonense de la magia Salvador Vicent, alias Yunke, quien presente su mágico Hangar 52, Ilusiones Clasificadas, un espectáculo único en el que el espectador podrá ver en directo ilusiones inéditas y originales creadas por el famoso y premiado mago de La Vilavella. Ver a Yunke es creer en la magia.

El teatro Flumen estrena el próximo jueves la obra del alcoyano Tirso Calero Aguacates, y el productor kamikaze José Sáiz la presentó en un gran Supermercado de la Hierba sana, que no de la otra. Sáiz vuelve a arriesgar, esta vez sin salir al escenario, pero cuenta con Juanjo Artero como protagonista principal, que se mostró encantado con València y su paella. Una comedia de enredo y liosa, pero a carcajada limpia, en la que también actúan Jesús Cabrero, Lucía Ramos y el hijo del productor, Ricardo Sáiz.

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