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El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunitat Valenciana confirma la autorización ambiental integrada otorgada por la Conselleria de Medio Ambiente a la unión de empresas adjudicataria de la construcción y explotación de la planta y vertedero de residuos sólidos urbanos del plan zonal I (els Ports-Maestrat). Instalación prevista en la partida de la Basa, en Cervera. Desestima así la petición de suspensión de la autorización planteada por el Ayuntamiento de Càlig y la Plataforma anti vertedero de la Bassa.

El tribunal apunta que la ley establece que para suspender los permisos la acción debe producir daños irreparables, algo que no se da en este caso.

No considera el tribunal que existe arbitrariedad por parte de la conselleria en el cambio de emplazamiento de la instalación. En el auto no se valor preciso paralizar la tramitación por el hecho de que «exista falta de publicidad».

Y en cuanto a la no idoneidad del emplazamiento elegido para construir la instalación medioambiental, uno de los ejes de la petición del consistorio y la plataforma cívica, entiende el TSJ que aunque lo autorizó el consorcio de municipios del plan zonal, existe un informe urbanístico. Atiende también el alto tribunal valenciano, la matización de que el informe de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) «no es negativo, sino que exige medidas correctoras adicionales, porque de ser negativo la autorización no podría haberse dado en sentido positivo».

La decisión del TSJ contraria a los intereses del consistorio caligense y la plataforma cívica puede ser recuerda ante la misma sala de lo Contencioso Administrativo, pero permite seguir adelanta con las obras en la Bassa.

En su demanda, el Ayuntamiento de Càlig cuestionaba el procedimiento seguido en la tramitación de las autorizaciones del vertedero y la planta y al mismo tiempo rechaza la desestimación del recurso presentado y pide la suspensión cautelar de todo el procedimiento administrativo.

Mientras el consistorio y la plataforma mantienen otros dos recursos contra la instalación, uno por el acuerdo del pleno de Cervera autorizando la expropiación y otro más por la aprobación por vía de urgencia del Consell del procedimiento expropiatorio antes aludido.

Mientras, la empresa concesionaria del plan zonal ha presentado ya al consistorio de Cervera el plan de obras y han realizado las labores previas para empezar los trabajos en la Bassa antes de que concluya el año.