­

La Universitat Jaume I de Castelló se sumará al proyecto de Campus de Excelencia Internacional (CEI) que las dos universidades públicas valencianas (UV y Politécnica) prevén presentar en la segunda convocatoria de 2010. El rector de la UJI, Francisco Toledo, ha trasladado su oferta a los rectores de los dos centros y tanto Francisco Tomás (UV) como Juan Julià (UPV) han dado su visto bueno, según avanzaron ayer fuentes de la Jaume I a Levante de Castelló.

La UJI será el cuarto actor de una propuesta que unirá a la Universitat de València, a la Politécnica de Valencia y al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Toledo ha mantenido en los últimos días encuentros con Tomás y Julià para perfilar la integración de la Jaume I y en las las próximas fechas se concretará el papel de la institución castellonense, señalaron las mismas fuentes.

La propuesta de las universidades valencianas se centrará en 2010 en las áreas de Ciencias de la Salud y Sostenibilidad. En el segundo campo, la UJI puede jugar un papel importante a través de su parque científico-tecnológico (Espaitec), mientras en el de la salud espera impartir Medicina y Enfermería a partir del curso 2010/2011.

Un nuevo proyecto más ambicioso con el que la UV, UPV y UJI esperan lograr el sello de excelencia. El Gobierno ha puesto en marcha en 2009 este programa con el que pretende modernizar el sistema universitario y situar a algún centro entre los 100 mejores del mundo. La UV y UPV optaron este año de forma conjunta al Campus de Excelencia y quedaron relegadas en la última fase. Su falta de compenetración hizo que su propuesta fuera desestimada por el comité de expertos del Ministerio de Educación. El Ejecutivo central otorgó el Campus de Excelencia Internacional a cinco proyectos presentados por las universidades públicas de Catalunya y Madrid, concedió el sello regional a otras 4 universidades(Córdoba, Cantabria, Oviedo y Santiago de Compostela, mientras concedió a la iniciativa valenciana la calificación de «Proyecto Prometedor CEI», por el que la animó a «realizar esfuerzos adicionales para obtener el potencial necesario». Con la entrada de la Jaume I de Castelló y el CSIC, el proyecto original gana enteros para obtener el próximo ejercicio el sello de excelencia.