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La falta de personal en el Hospital General de Castelló es cada día más insostenible. Enfermeros, médicos y profesionales de otras áreas, tanto sanitarias como administrativas, salieron en el día de ayer a la calle a protestar ante la escasez de plantillas que arrastra el centro sanitario y pidieron medidas urgentes a la Conselleria de Sanitat. La situación es especialmente preocupante si se analizan las listas de espera. En algunas especialidades, como traumatología, cirugía o urología , el tiempo de espera para una intervención es de un año. En otras, como oftalmología, un paciente puede tardar más de seis meses en entrar en quirófano para ser operado de unas cataratas.

La Junta de Personal del Departamento de Salud de Castelló se concentró frente a la puerta de Urgencias del Hospital General para exigir a la Conselleria de Sanidad la ampliación de la plantilla y «adecuarla a las necesidades actuales de los servicios sanitarios». Los responsables sindicales aseguran que sería necesario ampliar los efectivos de todos los centros sanitarios de Castelló cerca de un 18%, es decir, alrededor de 600 personas, para poder ofrecer la calidad asistencial necesaria a los usuarios.

«Exigimos la adecuación de las plantillas de todos los centros sanitarios del Departamento de Salud de Castelló. Los sindicatos que forman la Junta queremos trasladar que ésta es una reivindicación histórica que se arrastra desde hace 7 años, cuando se reguló la jornada de trabajo. La situación se ha agravado con la apertura de nuevas unidades, el aumento de la población y la introducción de nuevas técnicas y tecnologías», explicó Rubén Peña, presidente de la Junta de Personal.

Los profesionales critican además otras medidas que la Conselleria de Sanidad ha tomado en los últimos meses. «La desaparición del equipo de refuerzo, denominado volante, que existía para cubrir incidencias que se producían diariamente en los centros sanitarios, ha supuesto una sobrecarga para los trabajadores, repercutiendo en la calidad asistencial», insiste Teresa Ramos, secretaria de la Junta. Otra de las quejas realizadas por la Junta de Personal es que se suspenden los quirófanos programados por las tardes y los pacientes pasan a la denominada lista de autoconcierto, lo que sobrecarga el resto de servicios del centro. Teresa Ramos insistió en los problemas que sufre el área de maternidad y partos, donde se ha conseguido ampliar el servicio de la anestesia epidural durante las 24 horas del día, sin dotación de personal.

«En la actualidad no hay un celador propio para el servicio durante toda la jornada y hay turnos que se cubren con una sola auxiliar de enfermería, lo que conlleva una sobrecarga física», dijo.

Preocupante es la situación en quirófanos en el General. Pese a que cada uno de ellos debe contar al menos con tres enfermeros, en toda la unidad trabajan actualmente «entre 4 y 5 personas», que tienen que desdoblarse en varios servicios a la vez, incluso situados en diferentes plantas del centro hospitalario.