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El presidente provincial del PP y de la diputación, Carlos Fabra, se sometió anteayer a una intervención de trasplante de hígado en un hospital madrileño. Fuentes del entorno familiar explicaron a este diario que la operación se ha saldado con éxito, aunque incidieron en la complejidad de la fase postoperatoria. «Parece que todo ha ido muy bien, pero quedan unos días difíciles», señalaron.

Desde el PP castellonense detallaron que la intervención se prolongó varias horas –según dijeron, entre 8 y 10 horas– y también confirmaron que el resultado ha sido satisfactorio.Fuentes médicas explicaron a este diario que los días siguientes a una intervención de este tipo son delicados porque pueden surgir problemas quirúrgicos. Posteriormente, hay que someter al paciente a un tratamiento con medicamentos inmunosupresores para que no se produzca un rechazo del órgano trasplantado. Según las mismas fuentes, lo normal es que tras la intervención el paciente permanezca hospitalizado al menos 15 días, mientras que la convalecencia se prolonga varios meses. Si todo sale bien, apuntan, el paciente puede retomar una vida normal, con controles periódicos. Ponen el ejemplo del cantante Raphael,q ue padeció una dolencia similar.

Delegación de poderes

Tras meses de especulaciones sobre su estado de salud, Carlos Fabra delegó a mitad de marzo sus funciones en la diputación de manera indefinida al vicepresidente primero, Francisco Martínez. El mandatario provincial se marchó a Madrid para someterse a un trasplante de hígado.Las fuentes médicas consultadas afirman que este tipo de operaciones se practican en el Hospital 12 de Octubre de Madrid, cuyo equipo de cirugía capitanea Enrique Moreno, premio Príncipe de Asturias y considerado el «maestro» de los trasplantes en España.