Durante el verano se pueden dar varios periodos en los que las temperaturas suben de forma drástica y debemos estar preparados para que nuestra salud no se resienta.

Todos deben cuidarnos ante el calor extremo, pero hay algunos grupos de riesgo que deben estar especialmente protegidos y son:

- Las personas mayores, discapacitados y niños menores de 5 años.

- La personas que sufren una enfermedad crónica

- Las personas que toman alguna medicación de forma habitual

- Las personas que realizan trabajos físicos intensos

Las recomendaciones que debes seguir ante una ola de calor son las siguientes:

-No salir de casa en las horas centrales del día, cuando las temperaturas alcanzan sus máximas

- Beber líquidos sin esperar a tener sed

- Disminuir la actividad física

- Buscan siempre las sombras

- Utilizar ropa liguera, holgada y protección solar

- Permanecer en espacios ventilados y habitaciones frescas o con aire acondicionado

- Abrir las ventanas por la noche y cerrarlas por el día para que se ventile la casa con aire fresco

- Mantener la higiene de los alimentos y guardarlos convenientemente en el frigorífico

Es importante permanecer en lugares frescos y beber líquidos continuamente para evitar la deshidratación. La actividad física en las horas donde los termómetros registran las temperaturas más altas debe evitarse a toda costa.

¿Qué hacer ante una persona con un golpe de calor?

Si está ante una persona que ha sufrido un golpe de calor el primer paso que tiene que seguir es llamar a las emergencias sanitarias, 112.

El segundo paso es colocar al individuo en espacio a la sombra y quitarle parte de la ropa para airearle.

Si está consciente, lo importante levantarle un poco la cabeza y darle agua para que beba. Es importante refrescarle bien la cara y las axilas, pero no meterlo en la bañera para enfriarle

Si se encuentra inconsciente, hay que tumbarlo con las piernas flexionadas pero no darle nunca agua.