El equipo de gobierno de Alberic saltó ayer por los aires. El alcalde, Toño Carratalá, convocó a a sus hasta ahora socios de Coalición Valenciana para comunicarles su decisión de retirarles las competencias que tenían asignadas en base a una «pérdida de confianza» -les destituye como miembros del gobierno, suprime la dedicación parcial que cobraba la concejal Estefanía Sanz y el despacho que utilizaban los ediles de CVa- y agotará el mandato en minoría con el apoyo de los tres ediles que siguen con él en el grupo popular. Como mar de fondo de la ruptura del pacto se vislumbran las municipales de mayo, a las que ambos grupos llegan además con los papeles cambiados, ya que el PP ha designado candidata a Estefanía Sanz (CVa) en una operación con dos objetivos claros, recuperar a antiguos votantes y descabalgar a Carratalá, que se había postulado como candidato del PP y que finalmente liderará una lista independiente con la marca Ciutadans per Alberic. El presidente comarcal del PP no le perdona que apoyara la moción de censura al que había sido su jefe de filas, Faustino Sala.
La ruptura de la coalición a las puertas de las elecciones era previsible y tiene ya pocas consecuencias en la gestión municipal, aunque abre una caja de los truenos ya que era público que la relación entre el alcalde y el líder de CVa, Javier Cervelló, se había deteriorado hasta el extremo, aunque esas tensiones no han impedido que la coalición haya prácticamente agotado el mandato.
Toño Carratalá argumentó ayer una pérdida de confianza en los ediles de CVa para justificar su destitución ya que, según dijo, «están utilizando la información que tienen como miembros del equipo de gobierno para atacar al gobierno». «No tenía sentido seguir, ha llegado algo que tenía que llegar», comentó el alcalde.
Javier Cervelló, por su parte, no dudó en acusar a Carratalá de destituir a los ediles de CVa «porque vienen elecciones y no quiere que nadie le fiscalice, está saqueando el ayuntamiento en beneficio propio», incidió el líder de CVa, mientras aludía a los diferentes actos que está impulsando el alcalde, a su juicio, con un claro fin electoralista.
Se da la circunstancia de que la destitución se produce apenas unos días después de que los concejales de CVa solicitaran junto a dos de IXA la convocatoria de un pleno extraordinario para que, según detalló Cervelló, el alcalde diera explicaciones sobre una factura de las fiestas de 2014 que reclama un proveedor y de que, a través de una red social, un usuario con la marca «PP Alberic Candidatura 2015» preguntara «por qué el alcalde se ha gastado en el primer trimestre del año, y a puertas de la campaña electoral, todo el dinero de la subvención anual para actos culturales que nos ha concedido la diputación». «¡¡Qui vinga darrere que tangue la porta?!!», subrayaba el mensaje. Javier Cervelló acusó ayer al alcalde de estar practicando una política «de tierra quemada» para, según dijo, «no quede nada para el que venga detrás».
Se da la circunstancia de que Carratalá acabó expulsando ayer a Javier Cervelló de la junta de gobierno convocada para comunicar la destitución de sus socios de gobierno tras un cruce de interpelaciones. Cervelló es el líder de CVa, aunque no asumió competencias en el gobierno y no era miembro de este órgano, aunque en numerosas ocasiones sí ha asistido.
