Mucho ha pasado en el Cullera está temporada como para que no se produzca una reflexión en profundidad, tanto desde la directiva como desde el cuerpo técnico y la plantilla. El equipo se situaba entre los primeros hasta que tuvieron que marchar muchos de sus mejores efectivos, como fruto de la imposibilidad de la directiva de hacerse cargo de las fichas. A partir de ahí se sumaron jornadas y jornadas sin conocer la victoria y el descenso estuvo cerca. La permanencia fue un alivio.
El Cullera estará una temporada más en la Tercera División. ¿Lo dudó en algún momento?
No. La situación era muy buena antes de todos los cambios, con 43 puntos y el equipo en plazas de promoción. Estábamos muy lejos. En otra situación no sé lo que hubiera pasado.
Las complicaciones llegaron con el año nuevo. ¿Cómo cambió el equipo con la salida de los pesos pesados?
La problemática llegó porque salieron seis jugadores de dieciocho. No podíamos fichar y a esa situación se unió la lesión de larga duración de Javi Sánchez, Lucas se fracturó el metatarsiano de la mano y Abel se marchó a EEUU. Nos quedamos sin efectivos del primer equipo y tuvimos que conformar una nueva plantilla con jugadores juveniles y del filial. Por la problemática económica redujimos el número de entrenamientos también. La verdad es que la situación no era la mejor.
¿En que situaciones de convocatorias se ha tenido que ver?
De todo ha habido. Las últimas semanas quince jugadores de campo y sólo un portero y en edad juvenil, Alejandro, que además ha rendido muy bien. Por poner un ejemplo...
¿Ha sido su temporada más complicada?
Sin duda, porque han cambiado las reglas durante la temporada. No ha sido mi temporada, la que planificamos. Hasta que aparecieron las dificultades, el equipo rindió por encima de sus expectativas, estábamos peleando con los mejores y con eso me quiero quedar.
Con las dificultades que se han vivido esta temporada, ¿tiene intención de continuar en el Cullera?
Tengo contrato en vigor y considero Cullera mi casa pero ahora mismo necesito un tiempo para procesar todo lo que ha pasado y poder valorar qué es lo mejor para todos.
¿Ha habido conversaciones con la directiva para conocer que clase de proyecto se quiere configurar para la próxima campaña?
No. Creo que con todo lo que ha pasado lo mejor es acabar la temporada y a partir de ahí ver todo con tranquilidad.
Ha descendido también el filial. Un año realmente complicado para la entidad.
Sí, la verdad es que sí. Hay que hacer una profunda reflexión sobre los errores cometidos, sobre todo para que no vuelvan a pasar.
¿Qué nota pone a la plantilla y el cuerpo técnico en el conjunto del año?
Respecto a la plantilla que inició la competición, la clasificación te pone la nota: excelente. Los jugadores que se quedaron y los chicos jóvenes que quisieron que el Cullera pudiera seguir compitiendo: matrícula de honor, a todos los niveles, deportivo por su profesionalidad y personal. Respecto al cuerpo técnico, mi valoración la harán otros. La que yo hago de mi equipo de trabajo es extraordinaria. A nivel de trabajo cada uno en su parcela un 10. Y a nivel personal, sin ellos hubiera sido imposible soportar un año tan complicado. Desde aquí solo puedo felicitar y dar las gracias a Carlos, Joan, Benja, Alfon y Nuria.
