En la recta final de los campeonatos siempre se recuerdan esos goles, aquellas jugadas o aquel penalti que pudo cambiar el devenir de un partido y que solucionaría la situación actual. Sin embargo, la clasificación es la que es y los diferentes equipos que no han hecho todavía los deberes vivirán el próximo fin de semana una jornada de infarto en el que estarán pendientes de sus comportamientos y también de el de otros. Para los intereses de las formaciones ribereñas de la Regional Preferente aparece un dato enormemente positivo: dependen de sí mismos. Tanto el Algemesí como el Atlètic Alginet pueden salvarse si puntúan, aunque la situación de los segundos es mucho más complicada porque necesitan mejorar el resultado de los algemesinenses, que juegan ante el Pego.
El hecho es que a falta de una jornada el Algemesí cuenta con 37 puntos, el Pego con 35, el Atlètic Alginet con 35 y el Massanassa con 32. Tras descender Chella y Catarroja queda una plaza de descenso y otra de promoción. Si el Algemesí consigue ganar (por lo tanto con derrota del Pego), el Atlètic Alginet necesitaría de un empate ante el Sueca (juegan en casa) para salvarse completamente. Sin embargo, si los rojillos ganan y el Atlètic Alginet perdiese, dependerían del Massanassa, que podría dar la sorpresa con una victoria ante el Recambios Colón y sentenciar a los blanquiazules a Primera.
La otra posibilidad es que el Algemesí empate, por lo que el Pego sumaría un punto. Ante dicha situación el Atlètic Alginet necesitaría de la victoria, sólo del triunfo, para salvarse. Si con dicha carambola empatase, jugaría la promoción, ya que el «gol average» particular con el Pego lo tienen perdido y ante la igualdad de puntos, quedan por detrás.
Posible derrota rojilla
En caso de perder el Algemesí en casa ante el Pego, los rojillos se verían superados por los de la Marina Alta, por lo que se complicaría la vida ya que si el Atlètic Alginet ganase su encuentro serían los de la Burguete los que jugarían la promoción de descenso.
Por lo tanto, el Algemesí tiene suficiente con un empate para certificar la salvación automática, mientras el Atlètic Alginet debe vencer al Sueca. Dependen de sus posibilidades, de su capacidad, de su entrega. Una jornada queda. Ya no existe margen de error. Se miden, además, a un rival directo (caso del Algemesí) y a un conjunto que no se juega nada (el Sueca) pero que acaba de demostrar que no acabará la liga sin demostrar su potencial. Los de la Ribera Baixa vencieron esta semana al líder, el Canals.
