Los últimos doce acelerados meses desde las europeas de mayo de 2014 han cambiado radicalmente la forma de entender la política. Con el bipartidismo de capa caída se desmorona también una forma de hacer política, la de las mayorías absolutas. Si se confirma la tendencia, las elecciones no acabarán hoy. En muchos ayuntamientos, la incertidumbre se prolongará tres semanas más, hasta la constitución de los ayuntamientos y la investidura de alcaldes el 13 de junio. En el conjunto de España aún será peor: el suspense se prolongará hasta final de año cuando todo apunta a que el tablero político conocido hasta ahora saltará por los aires. Cargos del PP en la comarca admitían esta semana que si hace cuatro años la mayoría de municipios de la Ribera dio un triunfo claro al PP, este lunes las mayorías absolutas podrían contarse con los dedos de la mano.
Nada será igual. El pacto, el diálogo y el consenso tendrán que abrirse paso necesariamente porque la correlación de fuerzas es previsible que esté más cerca de la composición de los ayuntamientos que surgieron de las primeras elecciones democráticas, las de 1979 „con auténticas sopas de letras„ que de las mayorías absolutas posteriores: las del PSOE en los ochenta y primeros noventa y las del PP en las dos últimas décadas.
En la Ribera, de las últimas ocho elecciones municipales celebradas, los socialistas han ganado cuatro y los populares otras cuatro. Hace cuatro años, los pactos ya decidieron casi la mitad de las 47 alcaldías de la Ribera, cifra que aumentará irremediablemente si en la comarca se confirma el descenso que se atribuye al partido mayoritario en el conjunto de la autonomía, de entre 15 y 25 puntos porcentuales en intención de voto.
El PP cuenta en la actualidad con 24 mayorías absolutas „entre ellas la de Alzira, Cullera, Algemesí, Carlet, Villanueva de Castellón, Guadassuar o Turís„ el PSPV tiene seis, todas de escaso tamaño, y, Esquerra Unida, una.
El PP busca en la Ribera su quinto triunfo seguido en unas municipales y la décimotercera victoria electoral consecutiva. Hace cuatro años el triunfo popular fue incontestable, pero ya registró un retroceso importante en la mayoría de municipios más poblados:
Carcaixent, Cullera, Algemesí, Benifaió, Carlet, Alginet o Alberic. Además, el PP de la Ribera se quedó seis puntos por debajo de la media provincial y autonómica.
Los populares lograron hace cuatro años 250 concejales frente a 164 del PSPV; 57 de Compromís, 27 de EU, 29 de los partidos independientes y cuatro de Coalición Valenciana, todos en Alberic.
El PSPV tiene el récord histórico
Sin embargo, el récord histórico de concejales en la Ribera aún es socialista con los 282 ediles de 1983. Fue antes de que la gaviota engordara y la rosa se marchitara. La primera victoria de los populares en número de concejales se remonta a ???? cuando superaron por primera vez al PSOE. Desde entonces el partido de la gaviota ha ganado todas las elecciones. Hoy dirigen con mayoría absoluta los ayuntamientos de cuatro de las cinco poblaciones con más de ??.??? habitantes. Únicamente Sueca se les resiste. Visto con perspectiva, el triunfo popular comienza a fraguarse a mediados de los ?? una vez triunfa la operación puesta en marcha para fagocitar a Unión Valenciana, que llegó a tener 88 concejales en la Ribera en 1981.
