En Cataluña tienen tan claro que la Muixeranga de Algemesí es el antecedente histórico de los castells catalanes que lo exhiben al mundo con inusitado orgullo.
Volvieron a hacerlo este sábado en el kilómetro cero del món casteller, la localidad tarraconense de Valls, donde el baile de la procesión de la Mare de Déu de la Salut recibió el título de Ambaixador de la colla dels Xiquets de Valls en su edición de 2015, un acto que, además, sirve de preámbulo a la Festa Major de Valls. Además, El Museu Casteller de Catalunya otorgó recientemente un espacio relevante a las torres humanas de Algemesí al considerarlas su referente histórico
La proclamación de la Muixeranga de Algemesí como Ambaixadora forma parte del acuerdo de las dos colles castelleres de Valls para trabajar de forma conjunta con Algemesí en la proyección de las torres humanas y reforzar la capitalidad de Valls como ciudad cuna y kilómetro cero del mundo casteller. El concejal de Cultura, Pere Blanco, explicó ayer que se exalta este año a la Muixeranga por la recuperación de este baile en la procesión de 1973 cuando estuvo a punto de desaparecer. Por eso, el Mestre de la época, Tomás Pla, y un respresentante de los jóvenes que aquel año evitaron su desaparición, el exalcalde Vicent Ramón García Mont, tuvieron un papel destacado en el homenaje. Mont siempre ha explicado que el Mestre Pla logró reunir a alumnos del colegio Maristas para su aparición en la procesión de aquel año, cuando la Muixeranga no tenía ni por asomo el prestigio actual, lo que supuso un punto de inflexión ya que desde entonces se inició una lenta pero paulatina recuperación.
Conservar las tradiciones
Hoy, en Cataluña honran aquella efeméride de 1973 y la supervivencia del ball dels valencians, antecedente histórico de los castells. Blanco destacó la importancia de estos actos en los que se reconoce «el inmenso trabajo llevado a cabo por los algemesinenses para mantener y conservar las tradiciones de los valencianos». La Muixeranga es uno de los elementos patrimoniales más conocidos y seguramente el más representativo de la ciudad. Se trata de un conjunto de torres humanas y de cuadros plásticos acompañados de su música característica interpretada por la dolçaina y el tabal. Es, sin duda, uno de los símbolos inequívocos de la Festa de la Mare de Déu de la Salut, proclamada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco al igual que los castells catalanes. La relación entre valencianos y catalanes viene ya de antigua. La Muixeranga de Algemesí ya participó en las Festes Decennals de la Mare de Déu de la Candela en 1991 cuando se recuperó la Moixiganga de Valls, y también asistió a la Festa Major de Sant Joan del año pasado.
