Un convenio de colaboración entre el Ayuntamiento de Càrcer que dirige Josep Botella, la Diputación de Valencia a través de Imelsa y la Confederación Hidrográfica del Júcar ha permitido que se esté acometiendo ya un programa de limpieza y rehabilitación del cauce del río Sellent, invadido desde hace años por las cañas hasta provocar problemas de canalización que muchos temían que pudiesen convertirse en graves complicaciones de avenidas en caso de fuertes lluvias. Operarios de la diputación han estado estos días limpiando el cauce del río en las zonas secas, mientras el ayuntamiento continuará con la labor a través de la Fundación Linde, un organismo especializado en la restauración y protección de riberas de ríos con el objetivo de que el plan de actuación no se limite a la mera aniquilación de las cañas sino que también se restaure la vegetación original de la cuenca para favorecer así el nacimiento de un paraje natural que pueda ser aprovechable por los vecinos y vecinas de la localidad.
El alcalde de Càrcer, Josep Botella, marcó su prioridad desde los primeros días de su mandato, destinando una partida presupuestaria a una problemática estancada en el tiempo. El convenio de colaboración entre las diferentes instituciones permitirá la inversión de unos cinco mil euros.
