No hay mejor homenaje para un «homenot» como Josep Lluís Bausset que recordarle a través de una de sus pasiones: la pilota valenciana. El Ayuntamiento de l'Alcúdia promociona desde hace algunos años un campeonato de frontón valenciano en el que se miden algunas de las figuras más importantes de esta modalidad en el mundo, en un intento por mantener viva la llama del deporte más autóctono de los valencianos y recordar la figura del intelectual alcudiano, que en vida escribió cientos de columnas en este periódico con crónicas de partidas.

La primera partida enfrentó a Salva, del Puig, y al cubano Lemay, contra Adrián, de Quart, y Tonyo, jugador local. La capacidad física de Salva y del gigante cubano se vio compensada por el brazo prodigioso de Adrián y el ingenio y la colocación de las pelotas de Tonyo. El encuentro acabó 31 a 29 a favor de los primeros.

La segunda partida la disputaban Julio, de Alginet, y Montesa, del Puig, que iban de rojo, y Pasqual, de la Pobla, y Dani, de Alginet. Al principio, el joven Julio, nieto del gran Juliet de Alginet, empezó muy dubitativo y cometiendo errores propios de los nervios. Los azules aprovecharon la situación. Poco a poco, Julio fue sobreponiéndose ayudado por la iniciativa de su compañero Montesa, delantero que cada vez cogía más espacio en el frontón. Pasqual y Dani, que empezaron ganando, no pudieron resistir la fuerza física y la calidad de un Montesa que fue acrecentándose a lo largo de la partida. Finalmente, ganaron los rojos después de acordar llevar la partida a 35 puntos.

Al finalizar el memorial, las autoridades municipales y la hija de Josep Lluís Bausset, Matilde, entregaron los trofeos y reconocimientos. Matilde Bausset recibió también, en nombre del Ayuntamiento de l'Alcúdia una placa conmemorativa.