Desde la patronal también coinciden con los sindicatos en determinados aspectos sobre la crisis de los almacenes en la comarca. Desde la dirección de Frutsol explicaban esta semana que la enquistada crisis de la naranja hace difícil echar hacia delante el negocio. La naranja no se ha pagado a muy buen precio este año y ya acumula muchos cursos de bajada. Además, muchos socios han abandonado esta empresa que funcionaba como una cooperativa. Y el otro gran problema es el uso y abuso que hacen algunas empresas de trabajo temporal (ETT) de los trabajadores, a los que pagan salarios irrisorios, según denuncian desde CC OO, que piden mayores controles por parte de la Inspección de Trabajo. También desde CC OO y Frutsol coinciden en que el abandono de los campos hiere de muerte al sector. Por toda la Ribera se ven miles de tierras sin cultivar y campos echados a perder. p. bohigues cullera
