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La crisis agrícola compromete el futuro de la citricultura

La comarca de la Ribera está sufriendo de lleno la crisis del sector citrícola. En estos últimos años ya se han cerrado cinco almacenes (Frutas Ber y Frutas Ponche en Corbera, Hermanos Granero en Castelló de la Ribera, Frutas Crisbabe en Alberic y ahora Frutsol en Sollana) que han dejado en la calle a 1.700 personas aproximadamente, según cálculos de los sindicatos, que culpan a los supermercados de provocar esta crisis al bajar de forma considerable el precio de venta al público de la naranja. La situación es dramática para los trabajadores despedidos. La mayoría superan los 40 años de edad y el cierre en cadena de los almacenes les dificulta encontrar un trabajo en su sector laboral. La única opción es recurrir a las empresas de trabajo temporal (ETT) pero, según denuncian los afectados, en este caso los salarios son mucho más bajos. P bohigues sollana

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