La directora de cine y vicepresidenta de la academia, Gracia Querejeta, destacó el sábado en Cullera la vitalidad del cortometraje y señaló que el certamen que organiza en esta localidad la asociación K-lidoscopi está «al máximo nivel» por la calidad de las obras que competían en las cuatro secciones, algunas de ellas nominadas a los Goya o a la Berlinale. La gala de clausura de esta IV edición del festival convirtió a Cullera en la capital del cine español con la presencia de Querejeta, a la que la organización entregó el K-lidoscopi de honor, y del director Mariano Barroso, que recibió este reconocimiento en 2014.
La alta calidad de los trabajos a la que aludió la directora provocó que la decisición del jurado fuera muy difícil. Finalmente, «Todo un futuro juntos», de Pablo Remón, logró alzarse con el galardón al mejor corto, una categoria para la que estuvieron nominadas las producciones «Bikini», «Ezequiel y la galga María» y «Poor Sailor».
El mejor cortometraje de Animación fue a parar a «El ladrón de caras», de Jaime Maestro. En la categoría Documental, «En clave de Ortifus», de Ricardo Macián, se llevó el reconocimiento del jurado. El propio Ortifus subió al escenario para recoger el premio y realizó una encendida defensa del humor como arma crítica. En el Videoarte o Experimental, «Stringless», de Al Díaz, se llevó el primer premio de la categoría creada este año. La mejor dirección fue compartida para Víctor Carrey por «Poor Sailor» y Eva Marín por «Ezequiel y la galga María». Luis Bermejo, por su actuación en «Todo un futuro juntos» y Marina Alegre, inmensa en «La ropavejera», se impusieron como mejor actor y actriz.
