La empresa Gero Residenciales Solimar SL, dedicada a la asistencia de personas mayores, ya concentra prácticamente la mitad de su negocio en la comarca de la Ribera. La firma, de capital íntegramente valenciano, gestiona en la actualidad 1.158 plazas en la provincia de Valencia, de las que prácticamente medio millar están ubicadas en la comarca de la Ribera, en concreto en Alzira, Guadassuart y Sollana. La más grande de las tres es la de Alzira, con 122 plazas además de las 50 de centro de día. El centro mantiene un convenio con el hospital para la atención de enfermos en la unidad de rehabilitación funcional de mayores que está en funcionamiento en Alzira y a la que se suma desde 2014 la dedicada a usuarios con daño cerebral.
El consejero delegado de Solimar, Eugenio Pérez Mifsud, aseguró ayer en un encuentro en Alzira que recientes estudios apuntan a que la recuperación en este tipo de centros es mucho más rápida para el enfermo que ha sufrido dolencias como roturas de cadera o ictus. Mifsud asegura que la empresa se ha consolidado como la primera referencia en el sector por la innovación en cuestiones como el servicio domiciliario el major a casa o la unidad de rehabilitación funcional.
Con más de 450 empleados, el grupo se ha propuesto ampliar horizontes y a corto plazo espera poner en marcha negocios en otros países de la Unión Europea. Preparada para un período de estabilidad, Mifsud recuerda las dificultades que han atravesado las empresa concesionarias de servicios públicos por los problemas de impagos de la Generalitat en los últimos años con deudas pendientes superiores a los cinco millones de euros. La situación ha mejorado ligeramente aunque el retraso de los pagos del Consell supera los cinco meses.
Con todo, la gran novedad de la inversión realizada por la empresa en la Ribera es la consolidación del área de recuperación funcional enfocada especialmente a personas dependientes, a las que ofrece una atención especializada. Se trata de usuarios que no tienen ya la necesidad de seguir ingresados en el hospital, pero que tampoco gozan de la suficiente autonomía para su atención en el propio domicilio, un servicio que permite menor presión asistencial en el hospital de la Ribera.
Otro servicio que la empresa mantiene en la Ribera es el de ayuda a domicilio, una propuesta de carácter doméstico para que permite al usuario seguir en su entorno familiar aunque no pueda valerse por si mismo ya que incluye las tareas de atención personal e higiene y del hogar.
