Cerca de 800 jóvenes participaron en las distintas actividades organizadas por el ayuntamiento el pasado fin de semana. El acto más concurrido fue el Festival del Color, que reunió a 700 jóvenes en l'Hort de Feliu. El color también fue el hilo conductor de la primera Trobada de Grafitis que se llevó a cabo en el Barranc del Senyor. Esta iniciativa, que reunió a treinta grafiteros, tendrá continuidad en el futuro. La Regidoria de Juventut y la de Fiestas también organizaron, en colaboración con el Centre Excursionista, una Marxa a la Torre Espioca, último vestigio de un pueblo abandonado.