El Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana ha confirmado una sentencia que dictaminó en su día que el alcalde de Montserrat, el socialista Josep Maria Mas, vulneró un derecho fundamental de los concejales al impedirles votar en una sesión plenaria de diciembre de 2013.
La primera sentencia ya reconoció que debería someterse este punto a votación, aunque eso ya no es posible porque el pleno es de la pasada legislatura.
El punto que no pudo votarse era el de la rebaja de retribuciones del alcalde y el concejal delegado, designación de miembros de distintos órganos y entidades públicas y fijación de indemnización por asistencia a junta de gobierno y periodicidad de la celebración de plenos ordinarios. En el acta del pleno de aquel día consta que Mas manifestó que se procedería al debate, pero no a su votación, ni a la adopción de acuerdos en base a un informe del secretario. Finalmente ante la negativa de someter el punto a votación, los concejales discrepantes del Partido Popular se ausentaron del pleno.
La sala concluye que el procedimiento seguido era el adecuado por lo que se vulneró el derecho de los concejales a votar ese punto y que, por tanto, existió una vulneración del derecho fundamental de participación en asunto públicos, del artículo 23 de la Constitución, Recoge además la jurisprudencia que un pleno puede terminar sin votación de las propuestas pero no por voluntad del alcalde, sino porque lo decida la mayoría de los representantes ejerciendo la facultad de votar «que resulta el núcleo esencial de su función de representantes políticos», señala.
«Talante dictatorial»
Tras conocerse la sentencia, el PP de Montserrat aseguró que se demuestra el talante «antidemocrático y dictatorial» del alcalde, con una actuación que los vecinos tendrán que pagar de su bolsillo ya que se condena al consistorio a pagar costas, según la exalcaldesa y portavoz del PP, Laura Sanjuán. «Vamos a ser los vecinos de Montserrat los que paguemos los errores y las imposiciones de este señor», señaló ayer Sanjuán, que lamentó la actitud «soberbia» del socialista. Sanjuán recordó que Mas impidió «de manera unilateral», que la corporación municipal votase cuestiones tan relevantes como la rebaja de retribuciones, la designación de miembros en entidades públicas o las indemnizaciones por asistencia a juntas. «Mas se ha equivocado dos veces, primero vulnerando los derechos fundamentales y después recurriendo la sentencia que le obligaba a repetir la votación», dijo.
La defensa del alcalde alegó que no hubo vulneración por carecer los concejales de competencia para proponer la cuestión debatida y por abandono del pleno.
