El Ayuntamiento de Carcaixent aprobó en el pleno extraordinario celebrado ayer la modificación de las Ordenanzas Fiscales correspondientes a 2016. La propuesta de ordenanzas recoge una reducción de la tasa del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y de la de ocupación de la vía pública del mercado exterior, puesto que la de Carcaixent era muy superior a las localidades cercanas.

En cuanto a la reducción del tipo impositivo del IBI urbana, el punto quedó aprobado por unanimidad con una disminución del 0,85 % al 0,795 % para neutralizar el incremento del valor catastral impuesto por la actualización del proyecto de ley de los presupuestos generales del Estado de 2016. Esta revisión catastral suponía un incremento anual del 10 %. Pero para evitar este «golpe» a las familias, el ayuntamiento absorbe el 10 % de la base imponible, señala el equipo de gobierno. La medida, según el concejal de Hacienda, Vicent Lluís Roca, «resultará beneficiosa por las vecinas y vecinos que no verán aumentados sus recibos a pesar de que representará una disminución de ingresos para el Ayuntamiento». Desde el equipo de gobierno también se ha manifestado la intención, tal cómo se acordó en el pleno del mes de septiembre, de iniciar la revisión del valor catastral de los bienes inmuebles para el 2016 dado que la actual valoración lleva aplicándose desde el 2012.

En el caso de la tasa para la ocupación de de la vía pública para el mercado exterior también se ha aprobado por unanimidad la disminución del 10% para equipararse a la de los municipios más próximos, según informó el ayuntamiento. Actualmente, el precio que pagan los comerciantes del mercado exterior de Carcaixent llega a duplicar el coste que se paga en poblaciones próximas como Algemesí o Alzira.

Además, Vicent Lluís Roca ha expresado el compromiso del equipo de gobierno de realizar un estudio para analizar si es viable bajar todavía más la tasa para incentivar a los comerciantes a vender en el mercado exterior de Carcaixent. Desde el equipo de Gobierno remarcan que el mercado de los martes que se instala en esta localidad se tiene que considerar un eje comercial que tiene efectos positivos sobre el conjunto del comercio local y en especial con el Mercado Municipal. Por lo tanto consideran que un mal funcionamiento podría tener efectos nocivos sobre la actividad comercial de Carcaixent.