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Tributos

El Catastro detecta más de 500 obras irregulares en la comarca

En la mayoría de los casos se trata de ampliaciones no declaradas o piscinas realizadas sin notificación a Hacienda Algunos vecinos han optado por presentar reclamaciones

El Catastro detecta más de 500 obras irregulares en la comarca

Las inspecciones que la Dirección General del Catastro inició en 2013 para tratar de aflorar las obras y ampliaciones ilegales han detectado irregularidades en 18 municipios de la provincia de Valencia, entre los cuales se halla: Sumacàrcer, Rafelguaraf, Llombai y Tous. Cuatro localidades situadas en la comarca de la Ribera que suman, de momento, 528 expedientes incoados por este órgano dependiente del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas.

En el caso de Sumacàrcer la Dirección General del Catastro abrió 178 expedientes en un municipio con cerca de mil viviendas entre el casco urbano y diseminados. Txema Pelaez, alcalde de la localidad, explica que los inspectores de Catastro evalúan si las características de los edificios y construcciones inspeccionadas se corresponden con la realidad declarada en la base de datos de Hacienda y, si no es el caso, proceden a notificar al propietario dicha irregularidad.

A este respecto el munícipe argumenta que entre los 178 casos localizados en Sumacàrcer -o en cualquier otro municipio- pueden darse incidencias sobre ampliaciones de una vivienda que no fueron declaradas ni al ayuntamiento ni al Catastro o que, por ejemplo, el contribuyente convirtiera su balsa de riego en una piscina sin haber dado el correspondiente parte. Pelaez apunta que si los cuatro municipios de la Ribera han entrado en esta primera tanda de inspecciones «efectuadas por el Catastro y no por los ayuntamientos» es porque en las posteriores inspecciones entrarán el resto de localidades.

Es más, el alcade de Sumacàrcer admite que incluso su ayuntamiento tuvo que regularizar dos inmuebles de su propiedad que no estaban al convenientemente registrados «por desconocimiento» pues habían sido cedidos por sus propietarios registrando ciertas irregularidades ya subsanadas.

A nadie se les escapa que con esta regularización de unidades urbanas los ayuntamientos recaudaran más. En el caso de Sumacàrcer un 17% más en concepto de IBI en 2016, mientras que en el caso de Rafelguaraf la cifra podría llegar hasta el 16%.

Rafelguaraf

En Rafelguaraf, que cuenta con 1900 personas que pagan sus recibos de IBI, Hacienda ha incoado 317 expedientes. «Ninguno de obra nueva» apuntan fuentes del ayuntamiento, «la mayoría son ampliaciones de vivienda». Entre 2013 y 2016 se están desarrollando en toda España un Plan Antifraude que ha consistido en la puesta en marcha de un procedimiento de regularización catastral en varias tandas.

Llombai y Tous

En Llombai a día de hoy todavía no tienen conocimiento de la cantidad de expedientes que Catastro ha abierto a los vecinos del municipio. Mientras que en Tous, según apunta el arquitecto municipal José Luis Vallés, de momento sólo se tiene constancia de 33 personas afectadas. En el caso de este municipio 22 han cursado las pertinentes reclamaciones a Catastro al considerar que la institución pública había incurrido en un error y en los restantes 11 casos se trata de viviendas que, posiblemente, han ocupado una parte de suelo público.

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