El Ayuntamiento de Cullera volverá a abrir el comedor social para menores del municipio con motivo de las fiestas navideñas. De esta forma, se garantizará a los hijos de las familias de la localidad con pocos recursos económicos que tengan de forma totalmente gratuita al menos una comida digna en un período en el que los comedores escolares están cerrados por vacaciones. Esta es la primera vez que el consistorio abrirá el comedor social en Navidad, tal y como se comprometió el gobierno municipal hace unos meses dentro de sus políticas de ayuda a los colectivos más desfavorecidos para paliar los duros efectos de la crisis económica.

Desde la concejalía de Servicios Sociales que dirige Francesca Ortiz se han ofertado 30 plazas de comedor, un servicio que se prestará en las dependencias del colegio Sant Agustí ubicado en el Raval de Sant Agustí, precisamente una de las zonas de la localidad más castigadas por la coyuntura económica actual. El comedor estará en funcionamiento los días 23, 24, 28, 29, 30 y 31 de diciembre así como el 4 y el 5 de enero. Sólamente se cerrará los días festivos y fines de semana. El coste total lo asumirá el Ayuntamiento de Cullera, que además se hará cargo del pago de los dos monitores que gestionarán el comedor.

Este verano, una de las primeras decisiones tomadas por el nuevo gobierno municipal fue la abrir el comedor social durante el período de vacaciones escolares para atender las necesidades de alimentación de los niños de las familias más necesitadas, prestación que se financió con el recorte salarial al aparato político aplicado por el nuevo ejecutivo.

Ortiz ha asegurado que la apertura por primera vez en vacaciones de Navidad del comedor social «reafirma el compromiso firme del gobierno local en la lucha contra la pobreza infantil». «Es un problema latente, que sigue siendo una realidad social a la cual no podemos dar la espalda», ha explicado la edil.