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El nuevo plan hidrológico no garantiza suficiente suministro urbano a la Ribera

El PSOE denuncia que la concesión de sólo 10 hectómetros obliga a mezclar el agua potabilizada

El nuevo plan hidrológico no garantiza suficiente suministro urbano a la Ribera

La asignación a la Ribera de diez hectómetros cúbicos de agua que contempla el Plan Hidrológico del Júcar aprobado el viernes por el Consejo de Ministros resulta insuficiente para atender el suministro de los trece municipios que se abastecen de la potabilizadora, a los que sólo permite recurrir a la mezcla de agua para cubrir la demanda de sus conciudadanos. Las localidades incluidas en las primeras fases que ya reciben el agua de la planta de la Garrofera -Alzira, Carcaixent, Algemesí, Corbera, Llaurí, Favara y Cullera- suman actualmente 6,1 hectómetros cúbicos, a los que habrá que añadir los dos hectómetros cúbicos solicitados por el resto de municipios de la orilla izquierda. Está previsto que a finales de febrero el agua potabilizada llegue a todas las localidades incluidas en el proyecto.

«La concesión directa es de diez hectómetros y no cubre las necesidades porque la demanda que hace cada uno de los pueblos es para mezclar agua, la concesión es insuficiente porque no cubre las necesidades básicas del consumo que tiene la población de la Ribera», según denunció ayer el secretario de organización del PSPV, Fernando Pascual, después de que la ejecutiva comarcal del partido acordara en la reunión mantenida el lunes por la noche en Sumacàrcer mostrar su indignación por «la decisión del Gobierno de Rajoy -en este caso la aprobación del Plan Hidrológico del Júcar- sin tener en cuenta las necesidades de los vecinos de la Ribera, prohibiéndoles que puedan tener agua potabilizada para el consumo».

Pascual, que además es el representante del Ayuntamiento de Alzira en la comunidad de usuarios de la potabilizadora, detalló que únicamente Favara que solicitó en su momento 449 metros cúbicos anuales suministra a sus vecinos íntegramente agua de la planta potabilizadora, mientras que el resto recurre a la mezcla con agua procedente de los pozos.

«No es de recibo que el PP, desde el Gobierno central, condene una vez más a los ciudadanos de la Ribera a que puedan tener agua envenenada ya que, independientemente de que se hayan instalado filtros de carbón activo para eliminar los herbicidas, es un riesgo innecesario cuando pueden tener agua de la potabilizadora», incidió. Cabe recordar que el propio Pascual denunció hace escasamente dos meses en un pleno que si bien el anterior gobierno municipal había anunciado que en el caso de Alzira se estaba mezclando el agua al 50 %, únicamente se estaba bebiendo un 30 % del agua potabilizada. En esa misma intervención, el edil del PSPV también alertó de que la canalización que distribuye el agua procedente de la Garrofera no tiene capacidad para atender la demanda de los trece municipios de la Ribera que debía abastecer.

Agua cien por cien potabilizada

La ejecutiva comarcal del PSPV acordó manifestar su enérgica protesta contra la aprobación del Plan del Júcar en estos términos y presentará mociones en todos los ayuntamientos de la comarca para reivindicar ante el Gobierno el derecho de los vecinos de la Ribera a recibir agua «cien por cien potabilizada» sin tener que mezclarla.

Pascual señaló que los socialistas seguirán reivindicando agua de calidad y trasladarán esta demanda a todas las instancias de la Administración, incluso a la UE. Por otra parte, la ejecutiva valoró que la acción política mantenida por el PSOE en los últimos años «ha servido para que los regantes, la USUJ, no cobraran a los usuarios los 0,7 céntimos por metros cúbico consumido. Ese es un éxito, aunque el sabor político es agridulce porque no hemos conseguido en el plan de cuenta que se nos dieran los 31 hectómetros cúbicos que reclamábamos».

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