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Dos libros inéditos de temática religiosa de Fuster se publican 64 años después

El escritor e investigador alcudiano Santi Vallés consigue editar el original, prologado por Moragón

Dos libros inéditos de temática religiosa de Fuster se publican 64 años después

Más de sesenta años después de que Joan Fuster (Sueca, 1922-1992) escribiera el ensayo «Les idees religioses i l'existencialisme en el teatre modern» y tradujera y adaptara la obra teatral «La bona nova a Maria», de Paul Claudel, ambos trabajos han pasado a formar parte de la letra impresa. Los textos del intelectual que entonces contaba con 30 años, inéditos hasta ahora, los ha reunido la colección Rent de la Editorial Denes.

«Son dos obras que coinciden en el tiempo, escritas en 1952 para la celebración de la Coronación de la Mare de Déu de Sales de Sueca», recuerda Santi Vallés, coeditor de ambas piezas. El trabajo editorial, prologado por Francesc Pérez Moragón, se presentó el pasado viernes en el Espai Joan Fuster de la capital de la Ribera Baixa de la mano del propio Vallés y Agustí Colomer, director de la mencionada colección dedicada a literatura religiosa. El acto se celebró dentro de las «Tertúlies a ca Fuster» que organiza la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Sueca.

Fuster había escrito un ensayo en castellano con el mismo título, «Las ideas religiosas y el existencialismo en el teatro moderno», con la finalidad crematística de ganar un premio instituido por el registrador de la propiedad y el Colegio de Notarios de Sueca. La versión valenciana no llegó a publicarse, afirma Vallés. «No tiene nada que ver con el del título en castellano, que está escrito a favor de las ideas en la línea del régimen de la época», observa. En cambio «este es un ensayo de reflexión crítica sobre las diferentes tendencias del teatro de base religiosa; más que de base religiosa, de la condición humana», aclara.

Por otro lado, con la traducción y adaptación de «La bona nova a Maria», de Paul Claudel, Fuster pretendía «poder representar teatro que fuera más allá del sainete». Para ello, eligió una obra de gran importancia en aquel momento. Se representó en la Placeta Fonda, en octubre de 1952, ante todas las autoridades locales.

«Ambos textos se retroalimentan», según el coeditor. «Por una parte el ensayo, sin pretenderlo Fuster, sirve de marco interpretativo de todas las corrientes existentes del mundo del teatro y del pensamiento, y que avanzan algunas ideas de lo que posteriormente Fuster expuso en otros libros como 'El descrèdit de la realitat', 'Diccionari per a ociosos', o todas las entradas que escribe en la 'Literatura catalana contemporània', sobre la reflexión de la crítica literaria», matizó.

Localización de los originales

«La obra de teatro es un mecanoscrito, del cual sabemos que no se escribió con la máquina de Fuster», explicó Vallés. Contiene anotaciones de cuatro manos diferentes, y ninguna corresponde al autor suecano. Estuvieron buscándola a instancia de Agustí Colomer, que ya hacía tiempo intentaba recuperarla. El propio Vallés intentó localizarla a partir de las pistas del Epistolari Joan Fuster-Vicenç Riera i Llorca. «Pudimos saber que se había hecho una grabación, se había representado en radio, pero no conseguimos localizar la cinta», recordó.

Finalmente apareció mientras buscaban una carta en el fondo de Agustí Alamar, en la Biblioteca Valenciana. Respecto al ensayo, hay una copia en la Casa Fuster, y otra que Manel Chaqués localizó en los años 70 en un mercadillo. «A partir de esas copias se pudo realizar la versión más íntegra de la obra», según Vallés.

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