Finalmente el ya exalcalde de El Perelló, José Miguel Fos, no tendrá que comparecer ante la Justicia para defenderse de un presunto delito leve de amenazas. El denunciante, Federico Viñoles Carbonell, ha decidido retirar la demanda para la que hoy mismo estaba previsto en Sueca el juicio oral. Los hechos ocurrieron a principios del pasado mes de diciembre, durante la celebración de un mercado medieval en la entidad local menor (ELM).
Fos, en aquel momento presidente de la agrupación local del Partido Popular (PP), había destituido a Viñoles como miembro de la junta ejecutiva pocos días antes del incidente, del que ambos contaron diferentes versiones.
El ofendido, un vecino de poco más de 70 años, decidió retirar la denuncia a petición del propio Fos tras la dimisión de éste de la alcaldía y de la presidencia del PP local, según dijo a este periódico. Fue determinante a la hora de decidirse a dar un paso atrás el compromiso de Fos de «publicar un comunicado de prensa sobre sus dimisiones y no hacer ningún tipo de declaración al respecto», aseguró Viñoles. Este extremo «fue incumplido durante la semana pasada, en más de una ocasión», añadió.
El septuagenario afirmó que el acuerdo se llevó a cabo a través de Juan Botella, actual presidente local. Y que en nombre de la nueva dirección del PP de El Perelló, «me pidió disculpas por los actos ocurridos, me transmitió su pesar por mi expulsión de la ejecutiva y del injusto trato recibido por el anterior presidente», afirmó.
A Viñoles le pareció «incongruente que una de las razones declaradas por Fos en su dimisión haya sido nada menos que su frustración con dirigentes del PP que hasta hace unos meses han sido sus principales valedores a la hora de conseguir subvenciones en beneficio de El Perelló y que él aprovechaba para su propio lucimiento político, y de cuya relación con ellos se codeaba». Y lamentó que en todo el comunicado «no sólo no agradeciera sino que ni siquiera hizo referencia al resto de componentes de sus equipos de gobierno, que han trabajado a su lado en las distintas legislaturas».
Por último, el septuagenario presuntamente ofendido, manifestó que a pesar de sus incumplimientos «y del estado de nerviosismo y ansiedad que nos han provocado a mí y a mi esposa todos estos hechos acontecidos en los últimos meses, he decidido cumplir mi palabra dada y retirar la denuncia». Con ello, «quiero demostrarle al señor Fos que aún hay gente que sí que cumple con los compromisos adquiridos», concluyó Federico Viñoles.
