En la década de los sesenta del pasado siglo XX finalizaban las obras del tramo inicial de la avenida de los Santos Patronos de Alzira, en la confluencia con la plaza del Reyno, por donde discurría el río Barxeta que fue desviado al Xúquer por el sur antes de la entrada a la ciudad, cerca del malecón de defensa de las avenidas del río Xúquer, construido cuando se eliminó el puente de San Gregorio, antes de Santa María, a la entrada a Alzira por el norte.
El 21 de julio de 1967 fueron inauguradas las obras con el nuevo emplazamiento de los casalicios, donde se encuentran las pétreas figuras de los santos patronos de Alzira, Bernardo, María y Gracia, tras la desaparición del antiguo puente llamado de San Agustín, antes de 1717, que fue la entronización de las referidas imágenes. Aunque siempre es desagradable hacer desaparecer un puente, éste comunicaba las barriadas de la Vila y el Arrabal de San Agustín y al mismo tiempo las tierras del sur con el norte y viceversa, cuya llave simbólica abría y cerraba el reino, entendemos que el pecado más importante cometido en Alzira en 1920 y 1950, respectivamente, fue suprimir el curso de los ríos, Xúquer y Barxeta, que convertían Alzira en una isla.
Recordemos que los pueblos nacen al lado de agua. Si se hubiera planificado, la expansión de la ciudad podría haberse orientado hacia Corbera, la Murta o la Casella y conservar murallas, baños árabes y algunas casas de la Vila que eran verdaderos palacios, como por ejemplo el palacio que estaba frente al ayuntamiento, que albergó el asilo que acogió a los ancianos desamparados 84 años.
Centrándonos en el tema que desarrollaremos hoy, las obras de saneamiento en la avenida Santos Patronos, diremos que, al parecer, el solar en el que se levantó el edificio «Luz» -comenzaron las obras en 1969- estaba en principio destinado a zona verde, por lo que el colector de desagües discurría paralelo al mismo y cada vez que se producían intensas lluvias o avenidas del río se filtraban las aguas, anegando el sótano del edificio en cuestión.
Consciente el ayuntamiento de este grave problema, se proyectó por los servicios técnicos municipales desviar este colector, situándolo en el centro de la arteria principal de la ciudad. Tras redactar el proyecto, se llevó a cabo la propuesta de obras, llevándolo a la comisión de gobierno el 22 de julio de 1993. Las obras salieron a pública subasta y fueron adjudicadas definitivamente a la empresa COPGA, SL, el 11 de septiembre de aquel año, comenzando los trabajos el 10 de noviembre y tras la apertura de las zanjas -como vemos en la foto- en el centro de la avenida y plaza del Reino se colocaron los ovoides, buscando el piso a nivel de 6'50 metros, en el subsuelo.
Conclusión de la obra
Cuando finalizaba el mes de diciembre, la obra estaba casi terminada. El 30 de este mes fue extendido el mallazo que fue cubierto por una capa de hormigón H-175, de 25 centímetros. El martes 11 de enero de 1994, la empresa Peninsular de Asfaltos comenzaba la preparación del riego asfáltico, terminando los trabajos al día siguiente y el jueves comenzaban las tareas de pintar señalización horizontal, terminándola el viernes 14, abriéndose al tránsito a las 13 horas.
La memoria redactada por el ayuntamiento en justificación de la solución adoptada, decía: «La población de Alzira dispone en la actualidad -1993- a nivel de infraestructura de saneamiento, de una importante red general de alcantarillado sectorizada en la que se ha venido interviniendo constantemente a raíz de las trágicas y cíclicas inundaciones que a través de los años ha padecido la ciudad. Si bien, a partir del año 1983 se ha intervenido en varios sectores, mejorando notablemente la capacidad de carga de los colectores en momentos de descarga de fuertes aguaceros».
Esta obra de saneamiento y colectores en las avenidas de los Santos Patronos e Hispanidad -realizada hace 23 años- costó al erario público 18.246.546 pesetas.
